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| El contacto. | |
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Autor | Mensaje |
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Cero
Edad : 31 Mensajes : 90
| Tema: Re: El contacto. Lun Feb 27, 2012 12:09 am | |
| Observé como mi rival se caía de rodillas al suelo, parecía que el poderoso Cero volvía a ganar la batalla. Iba a realizar mi golpe maestro cuando, de repente, varias personas aparecieron volando a gran velocidad dentro del local, ¿es qué ahora los aether podían volar sin alas? Entre ellos estaba la chica de nuestro grupo, ¿cómo se llamaba? ¿Ulceryss?
Observé de donde procedía esa fuerza tan poderosa. No podía ser nada más y nada menos que de la partesandías. Me acerqué a ella y le dediqué una reverencia. me había dado cuenta de todo, habíamos venido a buscarla a ella, porque no había otra persona que pudiese partir las sandías como ella.
- ¡Ale! ¡Que alguien complazca a la chica! - Grité observando a mis compañeros mientras inconscientemente señalaba a sus pechos, cosa que era difícil no hacer.
Me alejé un poco de ella dirigiéndome a Ulceryss, que estaba en mal estado.
- Has perdido la peor de todas las batallas - mi vista se volvió a centrar en los "abolladores" de la mujer recién despierta. | |
| | | Cassandra
Edad : 36 Mensajes : 323
| Tema: Re: El contacto. Lun Feb 27, 2012 12:42 am | |
| Escuchó las palabras de la chrysos mientras arqueaba las cejas y no le quitaba la vista a la caeruleus. Entonces se dirigió a su enemigo, como si las palabras se las hubiese dicho la mujer sospechosa y no su compañera. - ¿Tu ves?- dijo en un tono de complicidad hacia la dama a la que apuntaba. - Intentas salvarles el culo y así te lo agradecen- le dijo sin dejar de apuntarla con su arma.
Bocanegra había mandado al posadero a buscar al resto de personas que yacían en sus cuartos, seguramente ajenos a tal espectáculo, sino, quizás habrían salido a husmear, pero la dama de largos cabellos lo había detenido, por lo que se había quedado entre las dos mujeres.
La Capitana se sació de esta lucha de poderes, en la que una y otra mandaban actuar al mesonero y, cuando Bocanegra se aburría de algo, generalmente se deshacía de ese algo. Guardó su arma y cogió al mesonero por los cuellos de la camisa para tirarlo escaleras abajo, pero justo antes de que lo lanzara por los aires, una onda de energía le voló el sombrero y le hizo ondear el pelo, pintando una mueca de susto en la cara, a lo que reaccionó soltando al pobre hombre, que se había librado de una caída fatal, seguramente.
Bocanegra se giró sobre si misma, tanto para ver el estropicio que se había montado a sus espaldas como para comprobar cómo estaba la situación.
Tuvo que reconocer que un gusanillo de miedo nació en sus entrañas al ver el espectáculo. Aquella mujer no era moco de pavo y por ello, debería andarse con más tino del que se había traído hasta la fecha.
Era valiente, pero lo suficientemente inteligente como para reconocer cuando había que guardarse la valentía y sacar un poco de prudencia, la cual le había demostrado la experiencia que era una muy buena aliada en las batallas y que no hace falta demostrar en todo momento la valentía, sino que debe ser guardada y liberada en el momento adecuado para que la situación no vaya a pique.
Analizó la situación. Alehyss herida y tres enemigos heridos. Ese ataque había merecido la pena, pues quizás hubiésemos perdido a uno de los nuestros, pero a cambio, tres yacían semimuertos, esperando que Korvas les diese la puya final, cosa que adoraban tanto el arma como su dueña.
Vio como el del pelo azul se dirigió a Alehyss para ayudarle, como si un fiel caballero ayudase a una dama en apuros, ofreciéndole su atención, como si ella no pudiera valerse por si misma, tanto por haber recibido un golpe y, seguramente, por ser mujer. En ese momento, la dama le preguntó a La Capitana cómo iban a sacarla de aquel lugar a la fuerza, pero ahora Bocanegra estaba demasiado enfadada con ese pintamonas como para atender a su enemiga.
Hizo un ademán con la mano, para hacerle entender a la caeruleus que se tenía que disculpar un momento- Discúlpame- dijo retrocediendo un par de pasos.-Ahora te contesto- comentó antes de echar a correr en dirección opuesta a la mujer de largos cabellos para acercarse a tanto a Lyam como a Cero.
Sin previo aviso y mientras el joven de pelo cián se deshacía en atenciones y preocupaciones por Alehyss, La Capitana le soltó un capón en todo el cielo del cráneo para luego dirigirse a Cero y echarse encima de él como una bestia en celo. -SOIS ASQUEROSOS, BABOSOS, REPUGNANTES, ZAFIOS, MALDITOS INSOLENTES, MACHISTAS DE MIERDA, IROS A TOMAR VIENTO- decía mientras los zarandeaba a ambos-DAD GRACIAS QUE NO OS HE CONOCIDO EN OTRAS CIRCUNSTANCIAS PORQUE OS HABRÍA HECHO PAPILLA!- gritaba intentando golpearles el mayor número de veces posibles.
A decir verdad, aquel momento se podría calificar de divertido, aunque La Capitana estuviese al borde del infarto por semejante grosería la de Cero y las atenciones principescas del peloazul.
Una vez creyó su ataque finalizado, (y comprobar por el rabillo del ojo que la chrysos estaba con vida, sino se habría parado a ayudarla) volvió hacia la mujer caeruleus para continuar la charla.
-Discúlpame, pero es que me han tocado unos compañeros un poco babosos. - dijo escupiéndose en una mano para luego frotárselas entre sí y luego limpiarse las palmas en sus glúteos.
Pero la mujer se había puesto a caminar cerca de Heylel diciendo que debían complacerla para que accediese a su petición de acompañarles, luego se dirigió a Lyam y La Capitana se quedó expectante, analizando la situación.
Esta tía era un putón. Le gustaban los hombres jóvenes... pero al parecer no cláritas, puesto que al inútil de Cero no se le había acercado.
Bocanegra se sentó en una silla y bufó. Que asco le daban aquellas situaciones. No le gustaba dejar nada en manos de otros, pero ella no tenía pene, y, seguramente, era lo que aquella mujer buscaba. Un buen trozo de carne que la llenase.
Se le revolvieron las tripas. No por el acto en sí, sino porque en eso se parecía a ella. Buscaba hombres simplemente por el acto carnal y luego tirarlos en una cuneta cual perros.
Dijo entonces que era el contacto. Era visto. Pero a Bocanegra le impresionó de igual manera, por lo que se puso de pié de un golpe y señaló a ambos hombres.
-YA PODÉIS ESFORZAROS- les escupió.
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| | | Alehyss
Edad : 30 Mensajes : 3185
| Tema: Re: El contacto. Mar Feb 28, 2012 10:33 am | |
| Con los bandidos corriendo hacia mí y atacándome, no noto el movimiento de la mujer hasta que es demasiado tarde. En un primer momento, pienso en saltar hacia alguna dirección para tratar de esquivarlo, pero pronto me doy cuenta de que es imposible. Una especie de barrera nos arrolla a los hombres y a mí. Yo, en particular, acabo dando con la espalda contra la pared, quedándome sin aire y sintiendo enseguida el dolor, y resbalando seguidamente hasta llegar al suelo.
Trago saliva, con sabor a sangre, mientras, tendida, me quedo un par de segundos inmóvil, pensando. Miro a mi alrededor, a los otros tipos que reciberon el golpe, y centro mis ojos en el chysos, que sangra en abundancia.
Apoyo las manos en el suelo para ponerme en pie. Justo entonces Lyam hace aparición.
- Estoy bien -murmuro-. Solo ha sido un golpe.
Aunque me ha tendido la mano, algún tipo de orgullo me impide aceptarla y me pongo en pie sin ayuda. Limpio mi boca con el reverso de una mano y recojo mi arma del suelo. Observo de reojo a Cero, que me dice que he perdido la peor de las batallas mientras mira mis pechos.
-Quítate de mi vista -siseo.
Paso a mirar a Cassandra, que me sigue poniendo nerviosa, pero voy a dejar de decir nada. Me guardaré mis opiniones. Si a ella no le importan, a mí menos. Este golpe ha bastado para que me centre un poco. Sin embargo ella viene hacia nosotros y se pone a gritar y a tratar a Cero y Lyam de forma un tanto...
Aprieto la mandíbula.
- Acabemos con esto -digo en alto, a nadie en particular.
Sin embargo, casi he de comerme mis palabras. Parece que "acabar con la misión" incluye que la dama se acueste con Lyam y Heylel, y eso es algo que yo no puedo hacer. Y, por las formas en que ellos responden, o son bobos y no saben de qué habla o no están dispuestos.
Miro de reojo a los bandidos, casi todos heridos.
- Largo de aquí. Esto no tiene nada que ver con vosotros y no quiero tener que mataros -les escupo.
A ver si al menos ellos se van de una vez y dejan de montar bulla donde ya sobra. | |
| | | Narrador
Mensajes : 1439
| Tema: Re: El contacto. Dom Mar 04, 2012 6:30 pm | |
| La acción había decaído de pronto, pero de todas formas todos podían intuir lo peligroso que se estaba poniendo el ambiente, aunque por el momento la dama caeruleus no parecía violenta. Simplemente estaba en pie, como si disfrutara de aquel espectáculo y ellos fueran poco más que unos actores que habían asistido al lugar a ofrecerle su función.
Lyam, preocupado, fue a ofrecer su ayuda a Alehyss en cuanto esta cayó, pero la muchacha no aceptó la mano del chrysos y se puso en pie. Tras hacer un comentario cortante a Cero, que encontó la ocasión apropiada para hablar de pechos, instó a los bandidos a salir del local. El parvus y el flamma se apresuraron a coger a su compañero chrysos, herido de gravedad, con clara intención de abandonar el local, mientras que los restantes se acercaban a la puerta sin perder de vista a la mujer y a los guerreros.
Mientras esto sucedía, Lyam, Heylel y Cassandra prestaban su atención a la mujer, que los miraba entre desafío y diversión. Bocanegra, al oír la indecente proposición que la mujer hizo a dos de sus compañeros, los instó a esforzarse en la tarea que ella les encomendaba, mientras que Heylel y Lyam solo preguntaron qué debían hacer para que los acompañase de una vez a Brönte. Mientras estaba a otras cosas, Lyam pudo ver como Cassandra se dirigía hacia él para darle un capón. Seguidamente, fue Cero el que se convirtió en objeto de los insultos de la piscis, que parecía querer golpearlos y zarandearlos a ambos a causa de sus comportamientos "machistas".
La dama observaba toda la escena divertida.
- Parecéis un grupo muy unido -comentó con cierto cinismo.
Se retiró un mechón de su cabello, blanco, y se acercó nuevamente a Heylel, ignorando a los demás. Se inclinó sobre él, sin darle posibilidad alguna a escapar, y susurró a su oído unas palabras que ninguno más pudo escuchar. El aether se quedó inmóvil un instante antes de que sus ojos brillasen, comprensivos, al decir la caeruleus la última palabra y cerrar los labios, sonriente y altiva. | |
| | | Heylel
Edad : 36 Mensajes : 1009
| Tema: Re: El contacto. Dom Mar 04, 2012 7:24 pm | |
| En lugar e responder a nuestras preguntas la mujer se limita a mencionar la mala estructura de nuestro grupo. Reprimo un gesto frustrado ya que era obvio a pesar de que en un pirncipio hubiese tratado de evitar tal sensación.
El escaso alivio que puedo llegar a sentir cuando Lyam se ofrece para cumplir el pedido de la mujer se borra al momento en caunto veo que esta se acercaba a mí de nuevo. Se inclina sobre mí haciendo que me quede inmóvil y tieso durante unos segundos. Trato de no mirarla, ni olerla, ni pensar en que está tan cerca que casi me roza con su delantera. Trago saliva y miro a la pared decorada con los diferentes tipos de licores del bar.
Pero lo que me dice me sorprende ligeramente y olvido cualquier extraña sensación para centrarme en sus palabras. El hombre del que habla debe ser el que ha permanecido inmóvil todo este tiempo. Parece que la mujer solo tiene oportunidad de transmitirme a mí la información y ahora yo cargo con la responsabilidad de sus palabras. Me tomo unos segundos para soltar el aire y respondo en un susurro que solo ella escuche.
-Está bien... -
Crispo las alas y me aparto bruscamente dando unos cuantos pasos hacia atrás con gesto dequiciado.
-¡Lo siento, mi señora! ¡Pero no puedo hacer lo que me pide! ¡Por Mithos juro que no puedo! -Grito, alterado mientras sigo retrocediendo de forma torpe. Miro a mi alrededor como si buscase el apoyo de mis compañeros y giro en redondo para ampliar esa busca a todo el local como queriendo que cualquiera se acerque a echarme una mano. Realmente solo quiero enfocar bien la mesa del hombre solitario para continuar acercándome.
Cuando estoy cerca de Cassandra miro a Lyam y Alehyss.
-¡Compañeros, sabeis que daría cualquier cosa por esto! ¡Pero no puedo permitirlo! -Grito haciendo gestos con las manos. Dirijo una mirada a los ojos de Lyam -pues es es al último que me coincide mirar en mi revuelo- y sutilmente indico con los ojos a dónde me dirijo para que, al menos, se vayan moviendo hacia el lugar.
Al pasar al lado de Cassandra la agaro de un brazo.
-¡Bocanegra! ¡si no fueras una mujer te pediría que hicieses algo! ¡Reprendo con rabia que no podáis hacer lo que un hombre en muchas situaciones! -La incito. Sé que su temperamento le impide captar señas sutiles sin llamar la atención así que es la mejor forma de hacer que me siga mientras continúo retrocediendo.
-¡Cero! Eres un caballero y un buen amigo.. Yo.. yo... Dejádme, ¡no me judguéis! ¡No estoy preparado para esto! -Grito empujando al claritas hacia adelante para continuar acercándome a la pared del fonod patosamente.
Acabo por chocarme de espaldas con la mesa del hombre y me giro, patoso, para impedir que se tambaléee y, de paso, echar un rápido vistado en busca de alguna clase de arma o curiosidad.
Me aparto para continuar retrocediendo y señalo a la mujer con una de mis tonfas.
-¡Soy un hombre casado! ¡Mi amor no puede verse en entredicho de esta forma! ¡No oséis tratar de hacerme incumplir tal sagrada promesa! -Y al fin consigo apoyarme contra la pared, detrás y a la derecha de la mesa del hombre. -Por favor.... os lo suplico... No lo hagais... -Digo, con voz vacilante y asustadiza opara completar una actuación que me hace temblar las piernas por el miedo a que salga mal. A mi favor juega que parte del sentimiento que expreso es cierto, en mi contra que solo yo sé realmente el por qué de mi enagenación. Ahora no sé qué demonios hacer. Solo pediré al cielo que tengamos suerte. | |
| | | Cero
Edad : 31 Mensajes : 90
| Tema: Re: El contacto. Dom Mar 04, 2012 8:53 pm | |
| El hombre ese con pechos produjo un grito de gran calibre, casi tanto que por un momento llegué a pensar que me había quedado ciego de oído. Volví a dirigir mi mirada hacia la dama de los voluptuosos pechos, que al parecer había inundado el local con un ambiente muy negativo y bélico. Además, parecía no importarle nuestra presencia, la de los grandes caballeros celestiales de Mithos.
Observé junto a mis compañeros como le dirigía unas palabras al oído de mi gran amigo Grettel, el cual reaccionó bastante afectado.
- ¡No te preocupes, Grett! ¡Yo lo haré por ti! - Grité acercándome a la pareja, o trío, según el número de personas que entiendas que había allí.
No me parecía justo que Grettel por ser aether pudiese participar y colborar más que nosotros, el contrato de venta de bollos podría ser firmado por cualquiera, incluso por mí. Dirigí mi mirada hacia la "mujer oscura".
- ¿Qué debo hacer? - Pregunté adoptando una postura seria. | |
| | | Lloyd
Edad : 33 Mensajes : 2032
| Tema: Re: El contacto. Vie Mar 09, 2012 3:38 am | |
| Retiró la mano al ver cómo la chica se levantaba y desvió la mirada hacia la pared. Fue entonces cuando sintió el golpe de la piscis. Frunció el ceño, claramente molesto, y se giró para mirar a Bocanegra. Cuando intentó volver a golpearle, el chrysos se apartó hacia la derecha y la fulminó con la mirada. Tenía la mandíbula apretaba y su mal humor era aún más palpable. Había estado molesto desde que habían llegado a la posada, pero, conforme la misión había avanzado, la molestia había dado paso a un humor de perros que acababa de aumentar por culpa de las agradables palabras de la piscis. Estaba, simplemente, harto de ella. Harto de sus aires de superioridad, de sus contestaciones sin sentido, de que hiciese lo que le diese la gana como si fuese su maldita líder...
Bufó. De pronto se sentía furioso.
—Mira, Bocanegra, cállate de una puta vez — siseó, y clavó sus ojos en los de la piscis —. Porque, si vas a gritarme por... ¡No sé! ¡¿Por estar preocupado por ella?! — Señaló a la chrysos —. ¡Si me gritas por preocuparme por ella, mejor cállate! Porque me ahorras muchos dolores de cabeza y nos ahorras a muchos todas tus gilipolleces. No creo, a diferencia de ese imbécil — Miró al claritas —, que haya perdido ninguna clase de combate. — Volvió la vista a la piscis —. ¡Tampoco creo, como seguro que piensas, que sea incapaz de valerse por sí misma! ¡¡Simplemente estaba preocupado por ella!! ¡Nada más! Así que agradecería que no me llames zafio, baboso, asqueroso, machista o cualquier otra palabra semejante, ¿de acuerdo?
Si hubiese tenido algo a mano para golpear, lo hubiese hecho. Pero, como no lo tenía, se limitó a maldecir por lo bajo y a alejarse de la piscis. Chasqueó la lengua y miró de soslayo a la chrysos. Luego suspiró y bajó la cabeza.
—Joder... — murmuró para sí. Hacía bastante que no perdía los nervios con alguien, y hacía mucho más que no los perdía en medio de una misión. Volvió a chasquear la lengua. Sabía que no debía haber contestado a la piscis y, aunque en esos momentos no se arrepentía del todo de haberle respondido, sabía que no tardaría en hacerlo.
Suspiró de nuevo y observó cómo el parvus y el flamma cargaban al chrysos. Fue ese el momento en el que se dio cuenta de que el chrysos se había herido al recibir el impacto del hechizo de... ¿la mujer? Se preguntó si ella habría hecho el hechizo o si había sido otro de los clientes de la posada. Volvió a suspirar. Debió haberse centrado en contemplar las reacciones de los clientes, no en preocuparse por la chrysos. Eso era más profesional y, a fin de cuentas, estaban en una misión. Había que ser profesional.
Cuando la mujer habló, el chrysos la miró de reojo, con una mueca de frustración dibujada en la cara. Observó, con ambas cejas alzadas, cómo se acercaba a Heylel y se preguntó qué le estaría diciendo. Buscó con la mirada a la chrysos y la miró con un gesto confuso. Luego desvió su vista hacia el claritas y la piscis y los miró durante unos escasos segundos, hasta que el grito del aether le hizo volver su atención hacia él.
Heylel acababa de alejarse, con una expresión desquiciada dibujada en el rostro, de la mujer, al tiempo que perjuraba que no podía hacer lo que ella acababa de pedirle. El chrysos frunció el ceño, más confuso que antes, y observó los movimientos del aether. Por algún extraño motivo, veía exagerado el comportamiento de su compañero. Sus gestos, su tono de voz y su expresión... Todo eso no concordaba con su imagen de Heylel, un hombre tranquilo al que no recordaba haber visto así antes. Pero, claro, también era cierto que no lo conocía demasiado, por lo que aquella mujer podía haberle dicho algo que lo hubiese alterado hasta tal punto.
Cuando el aether lo miró, frunció aún más el ceño. Observó el sutil movimiento de los ojos del aether y miró al lugar señalado de soslayo. Luego volvió a centrar su atención en Heylel, y escuchó las palabras que le dedicaba a Bocanegra. Fue entonces cuando cayó en la cuenta de que el aether estaba fingiendo. Porque podía buscarle una explicación a su comportamiento anterior, pero no encontraba ningún motivo lógico que llevase a Heylel a dirigirse con esas palabras a la piscis, que, sin duda (y eso el aether también debía saberlo), estallaría al escucharle. Además, su manera de dirigirse a la piscis no concordaba con la forma con la que había tratado con ella durante la misión.
Miró a la chrysos de reojo. Supuso que ella también había llegado a la misma conclusión que él, pero, de todas formas, repitió la forma en la que el aether le había indicado hacia dónde se dirigía. Luego se acercó a su compañero con pasos cortos, como si temiese provocar alguna reacción violenta en él. Justo después de que Heylel empujase al claritas, el chrysos se dirigió a él.
—Heylel, tranquilízate — dijo, con los ojos clavados en los de suyos. Luego avanzó hacia el lugar al que su compañero se encaminaba, al tiempo que el aether lo hacía —. Mira, ya sabemos que harías cualquier cosa por esto, así que calmante, por favor.
A pesar de que sujetaba la daga con la mano derecha, levantó los brazos a la altura de su pecho y le mostró las palmas de sus manos al aether (o, mejor dicho, le mostró la palma izquierda, pues nunca dejó de sujetar su arma). Luego observó cómo su compañero se colocaba, sin dejar de gritar, detrás de la mesa del hombre que estaba a solas, en la parte derecha. Cuando terminó de hablar, el chrysos, que estaba a escasos metros de la mesa, miró de reojo a la dama y volvió a dirigirse a Heylel.
—Tranquilízate, encontraremos alguna solución al problema... — murmuró, lo suficientemente alto como para que él lo escuchase, pero no para que la dama o el resto de las personas alejadas de la mesa lo escuchasen —. Pensaremos algo para solucionarlo...
FdR. me ha llevado dos horas e_e (todo es descripción, duh. tiene sentido ;o; y había algo que no sabía describir). also... cassandra ha hecho que perdiese los nervios durante un rato D: | |
| | | Cassandra
Edad : 36 Mensajes : 323
| Tema: Re: El contacto. Vie Mar 09, 2012 11:18 pm | |
| Ante los desmesurados e injustos golpes de la capitana a sus compañeros, uno de ellos, Lyam, decidió plantarle cara y, después de defender su acto, argumentando sólamente su preocupación por tal agresión a la valiente Alehyss, y de mandarla callar con modales más bien burdos y fuertes, esta contestó.- Ñañañaña Lyam - dijo negando con la cabeza mientras ponía las palmas de las manos hacia arriba moviéndolas horizontalmente. - No seas tan picajoso. Si vosotros tuvierais que parir...- dejó caer antes de darse la vuelta en 180º para prestar atención a la caeruleus, que ahora mismo, estaba con sus labios posados en la oreja de Heylel.
Mientras ella hablaba en susurros con él, Bocanegra giró la cabeza. No pensando en lo que le estaría diciendo la imponente mujer a Heylel, sino en el mismo Heylel. Pensaba que quizás ese fuera la excepción que confirmase la regla de que los hombres son todos iguales... igual de gilipollas y anormales. La Capitana pensaba, que si éso era así, quizás tendría que tener una palabritas "a solas" con Heylel cuando llegasen a Brontë.
Pero sus pensamientos se vieron interrupidos por el sobresalto de Heylel, lo que hizo que diese un paso hacia atrás. Estuchó atentamente las palabras de éste... hasta que, Heylel echó por tierra lo poco bueno que Bocanegra podía ver en él, teniendo en cuenta su condición de varón. Sus palabras le cegaron de odio, de rabia y de una frustración tal... que no supo como cómo reaccionar. Nunca, nadie, jamás le había dicho aquellas palabras tan libremente a la cara y tan directas, por lo que simplemente tardó tanto en procesar la información que negó con la cabeza, creyendo o queriendo creer que lo que había escuchado no había sido más que un mal juego de su cerebro, pero a los pocos segundos, reaccionó, haciendo que, de golpe, como si de un mantel que es tensado por dos fuertes personas una tirando desde cada extremo, sus orejas se desplegaron, dejando ver sus enormes membranas, que hicieron un ruido seco al desplegarse. Lo hizo tan rápido que hasta a ella misma le dolió. Las membranas de los dedos también se le habían desplegado, pero no tanto. -OYE TU, SEMEJANTE INSOLENTE!- le gritó sin saber muy bien que hacer ni qué decir, ya que él ya se ha desplazado hacia la mesa donde aquel hombre descansaba y la Capitana lo tenía ya fuera de su alcance, aún así, con un fortísimo arrastre de su pesada gabardina que parecía plomo en vez de cuero, se movió, con pasos fulminantes hacia donde se encontraba Heylel.
Nadie sabrá nunca porqué Heylel no murió aquel día. Nadie que le propinase tales palabras a Bocanegra había sobrevivido para contarlo. Quizás... quizás ese mínimísimo aprecio que ella pudo haber desarrollado hacia él, sólo quizás, fue eso lo que salvó la vida del aether.
De todos modos, se acercó al alado y lo cogió por la pechera y, haciendo vibrar las membranas de sus orejas de un modo increíble durante unos segundos, lo acercó a él y, clavándole los ojos, dejó salir sus palabras, casi escupidas y acompañadas del pútrido olor que el alcohol deja en las encías.- Esto no va a quedar así. Creo que me debes unas palabras... en Brontë te espero- dijo con una furia sobrehumana.
Le soltó con asco la camisa y se sentó en la mesa en la que aquel hombre observaba todo, pasándose las manos por la cara. Cansada. ¿Qué demonios le pasaba?
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| | | Alehyss
Edad : 30 Mensajes : 3185
| Tema: Re: El contacto. Dom Mar 11, 2012 2:56 pm | |
| Pese a la rigidez de mi mandíbula, esbozo una sonrisa rota al ver que algunos de los bandidos salen de la posada. Con el espacio más vacío será más fácil terminar con esto sin interrupciones.
Enarco ampliamente las cejas, sin embargo, al ver a Lyam perder los nervios por las acciones de Bocanegra. Siempre creí que él era suficientemente templado como para no perder la actitud serena, aunque, bien pensado, creía lo mismo de mí misma y no hace ni cinco minutos que me ha pasado lo mismo.
Sin embargo, todo lo que pudiera llamar mi atención de mis compañeros, de la dama caeruleus o de lo que sea desaparece en cuanto ella habla al oído de Heylel y este comienza a comportarse de forma extraña. Centro mis ojos en él. Es tan impropio verlo así, actuando como en un teatrillo, exagerando hasta tal punto sus reacciones que parecen dignas de otro personaje, quizás alguien más efusivo, pero no de él.
Primero se excusa ante Lyam y ante mí por no cumplir con lo que la mujer le pide. Eso tiene sentido, adora a su mujer Gabrielle hasta tal punto que estoy segura de que en ningún momento haría nada que pudiera hacerlo arrepentirse el resto de su vida, pero es la efusividad lo que me resulta extraño.
Intercepto la mirada de Lyam y asiento imperceptiblemente, haciendo un gesto muy breve, de forma que solo quien se fije mucho en mí en ese preciso instante sea capaz de captarlo. Luego rompo el contacto visual para evitar sospechas y haciendo un barrido de mirada para volver mis ojos a Heylel aprovecho para mirar la mesa del hombre solitario.
Bien pensado... ¿Cómo puede seguir ahí sentado, inmóvil, como si nada? Llevamos un buen rato aquí y no ha hecho ningún gesto que llamase la atención.
Y toda duda que pueda albergar se desvanece al oír las palabras que dirige a Bocanegra. Hasta empiezo a preguntarme si no estará hechizado, porque no imagino al Heylel normal haciendo esos comentarios tan...
Viendo que mis compañeros se dirigen hacia esa mesa aprovechando como excusa lo dicho por Heylel, decido hacer algo yo también, pero quizás si me acerco de la misma forma que el resto quede demasiado sosprechoso. Al mismo tiempo, no me parece buena idea el quedarme lejos, pues mi capacidad para atacar de lejos es muy reducida.
Aprovecho el desplazamiento de Lyam para acercarme un poco, poniendo cara de curiosidad, como si me moviera el extraño comportamiento de Heylel. No obstante, me quedo como a metro y medio de ellos, mirando al aether. Si hay que reaccionar, ellos lo harán primero. Yo formaré parte de la segunda acometida. | |
| | | Narrador
Mensajes : 1439
| Tema: Re: El contacto. Dom Mar 18, 2012 9:38 pm | |
| Al oír las palabras de la mujer, Heylel comenzó a comportarse de forma extraña. Entre exageradas expresiones e insultos a Cassandra, consiguió que por una razón u otra todos se fueran acercando a la mesa del hombre solitario. Solo Alehyss quedó algo alejada del resto, pensando en lanzarse la segunda en caso de contratiempos.
En la mesa alejada, el viejo seguía nervioso, mirando la escena, con las dos chicas, una a cada lado, escudándolo.
Incluso cuando todos los guerreros lo hubieron rodeado, e incluso cuando Cassandra se hubo sentado a su lado, aquel hombre no se movió un ápice. Continuó observando fijamente al grupo, sin hacer en ningún momento movimientos violentos, casi sin moverse siquiera, y sin proferir sonido alguno.
La mujer caeruleus observaba lo que sucedía, de pronto con apariencia más seria y severa. Incluso parecía que comenzara a preocuparse. De todas formas, si bien algo no marchaba como ella esperaba, no hizo ninguna alusión a ello.
Casi todas las personas que había en aquel momento en la posada tenían sus ojos clavados en la mesa de aquel hombre, aunque algunos trataran de disimularlo para hacerlo menos obvio. Aunque se hubieran aproximado fingiendo que lo hacían para acallar al repentinamente extraño Heylel, era obvio que encontrarse a todo el grupo junto a aquella mesa de golpe era sospechoso. Por ello, aquella zona de la posada contenía más tensión, la tensión de los guerreros, la de la mujer caeruleus y también la del posadero y el resto de clientes, que centraban sus ojos en el suceso. Solo Cero, que era más distraído que los demás, estaba más relajado. Y por ello pudo ver una sombra arrastrándose velozmente hacia una esquina de la posada. Fue una visión tan rápida que el claritas no podía estar seguro de si había sido cierta o sus ojos le habían jugado una mala pasada. FdR- Siento mucho la tardanza, pero estuve con un montón de cosas que hacer y la verdad... Lo siento, vamos u.u | |
| | | Cassandra
Edad : 36 Mensajes : 323
| Tema: Re: El contacto. Jue Mar 22, 2012 9:55 pm | |
| Ella estaba cansada. Relajó los hombros y guardó a Korvas, junto con todas las membranas de su cuerpo y se relajó hacia atrás, apoyando su espalda en la silla, al lado de aquel hombre. Alzó una ceja dando una visual general al panorama, pero nada de lo que vio le ayudó a saber lo que tenía que hacer. -¿QUE ESTÁN MIRANDO? - dijo golpeando una jarra de encima de la mesa contra el tablón de esta. - ¡Atiendan a su vida, carajo! - dijo de nuevo en tensión. Sabían a quien tenían que llevar a Brontë, pero... ¿si esa mujer era lo suficientemente fuerte y, consecuentemente inteligente, ¿porqué debíamos venir a buscarla nosotros? ¿acaso no sabe llegar a Palacio por su pie? A Bocanegra no le gustaba ser la chacha de nadie.
Bufó. -MÉTANSE EN SUS VIDAS. -Hizo una pausa.- TÚ- dijo contra el tabernero- ¿NO TIENES COSAS QUE LIMPIAR? ¡ESTE ANTRO DA ASCO! - dijo dejándose caer de nuevo en la silla. No le gustaba que la mirasen tan fijamente tantas personas.
Vio entonces al hombre que estaba sentado a su lado alzando una ceja y, dirijiendose al grupo en general, habló. - ¿Y a este qué coño le pasa?- dijo viéndole con una cara de asco que casi se le cae de la cara de lo grande que era.
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| | | Cero
Edad : 31 Mensajes : 90
| Tema: Re: El contacto. Dom Abr 01, 2012 11:54 pm | |
| Mi mirada estaba perdida entre toda aquella multitud, de repente, me olvidé de todo, simplemente me centré en aquello que no había, aquello que no se hallaba, la nada, un punto invisible encontrado en mi campo de visión. Gente, colores y luces contrastaban todo su al rededor, pero casi no lo percibía, porque mis pupilas se centraban única y exclusivamente en ese punto. Agité rápidamente la cabeza, había estado varios minutos en babia, y volví a centrarme en el pecho de la extraña mujer. Entonces, fue ese entonces, el entonces en el que vi como rápidamente una sombra atravesaba una de las esquinas traseras del local.
Recorrí el suelo con mi mirada, de esquina a esquina, también analicé las escaleras -todo desde mi posición a varios metros-. También decidí mirar las paredes, podrían ser ninjas especializados en camuflaje.
Di varias vueltas sobre mi mismo, suelo, esquinas, paredes, escaleras, ya sólo me faltaba el techo, seguro que una pequeña hada pasando por el lado de la lámpara habría producido esa sombra tan ágil y veloz. | |
| | | Alehyss
Edad : 30 Mensajes : 3185
| Tema: Re: El contacto. Lun Abr 02, 2012 2:43 pm | |
| Me estoy poniendo nerviosa. De hecho, aunque Bocanegra es muy agresiva para mi gusto, entiendo que se sienta de esta forma. Yo tampoco sé bien a quien mirar, aunque miro al silencioso e inmóvil hombre de la mesa fijamente por si hace algún movimiento agresivo y debemos atacarlo.
Me noto en tensión. Lanzo una mirada de reojo, muy rápida para no perder a mi objetivo de vista, a Lyam, y luego otra a Heylel. Nadie parece saber qué hacer.
Y Cero parece tan atolondrado como siempre, mirando a todas partes menos a donde tiene que mirar. Me pregunto qué hace aquí este claritas. No solo tiene una nula capacidad para pensar o razonar, sino que además no parece demasiado ducho en combate. Y aunque lo fuera, que se dedique a mirar las moscas que pasan por la posada no es algo que resulte útil en absoluto.
De peor humor, tras ver cómo el mago pasa de lo que hacemos aquí, clavo de nuevo mis ojos en el hombre. Ya estoy harta de su silencio.
Me vuelvo ligeramente hacia la mujer caeruleus y la miro a los ojos. Si nos dijera qué demonios quiere, podríamos marcharnos al fin. | |
| | | Heylel
Edad : 36 Mensajes : 1009
| Tema: Re: El contacto. Mar Abr 03, 2012 12:33 am | |
| La mayor parte de mis compañeros se acerca con lo que mi "plan" ha funcionado pero, ahora aquí, no sé qué demonios hacer. Observo a cada uno de ellos y su aptitud. Bocanegra está furiosa y se sienta en la mesa del tipo tras zarandearme, Lyam y Alehyss se acercan y me miran con curiosidad y Cero se limita a mirar a su alrededor atontado. Maldición. Miro a los presentes, estamos montando un buen numerito... Pero el tipo que ahora tengo delante no parece moverse un ápice, ni siquiera cuando la piscis golpea su mesa o cuando se ve rodeado por nosotros. Miro a la mujer caeruleus, su cara no denota demasiado agrado y supongo que este tipo es bastante fuerte si debemos abordarlo por sorpresa. Demonios... Si se hubiese movido, le habría atacado con mis tonfas, pero estando tan estático empiezo a temer que se trate del algún tipo de disfraz o incluso de una broma pesada de la mujer para ponernos a prueba. No sé qué demonios hacer y creo que el sudor empieza a caerme por la frente. Pienso rápido sin pensar en nada. ¿Qué demonios hago? ahora solo puedo seguir con la cantinela del hombre despechado. Miro a los presentes y doy unos pasos atrás tomando un ángulo diagonal respecto al hombre sentado. - ¿Y ustedes qué están mirando? ¿Acaso creen que pueden juzgarme? ¡Aethes! -Conjuro sin pensar demasiado hacia donde están los clientes de forma que la trayectoria del hechizo se dirige hacia el hombre sentado y el fondo del local sin querer acertar a mis compañeros. Es un acto totalmente alocado y descerebrado, pero así al menos veré si este tipo está, por lo menos, vivo. FdR: - Spoiler:
| |
| | | Narrador
Mensajes : 1439
| Tema: Re: El contacto. Lun Abr 09, 2012 4:55 pm | |
| La confusión había calado hondo. Aunque ya todos estaban cerca del hombre, este no parecía hacer gesto alguno de reconocimiento. No respondió a las palaras de Cassandra. Simplemente se mantuvo inmóvil, erguido como estaba sobre su silla, con los brazos cruzados.
Alehyss, superada por la sensación de no saber qué pasaba, se volvió ligeramente a la dama caeruleus un instante. Esta, lejos de contestarle, se mantuvo con los brazos cruzados y una expresión que la muchacha no supo descifrar: una mezcla entre preocupación e interés. Ya no sonreía, pero a Alehyss le pareció de pronto que aquello era más importante de lo que creía. Algo gordo estaba pasando.
Heylel comenzaba a ponerse nervioso. Aunque había logrado cumplir con la primera petición de la mujer, cercar a aquel extraño, no parecía que esto hubiera dado resultado alguno. En su lugar, se había encontrado con que el hombre no respondía. Finalmente decidió probar a atacarlo. El aethes que conjuró voló hacia el hombre, que ni se molestó en esquivarlo. Una de las cuchillas de viento lo golpeó en el pecho, haciendo que su cuerpo se balancease hacia atrás y volviera a su posición real, sin apreciarse reacción alguna en su rostro. La otra no lo alcanzó, sino que sobrevoló el hueco que había entre su cabeza y su hombro y siguió su camino. Para sorpresa de todos, tras este suceso el brazo del hombre pasó de estar cruzado sobre su pecho a caer inerte, como si el extraño estuviera muerto.
En ese momento, Cero, que observaba a su alrededor con curiosidad, buscando hadas, vió como algo se movía. Había algo en el techo, pero era del mismo color que este y su figura se camufaba perfectamente. Sin embargo el claritas vió perfectamente el movimiento y pudo al fin diferenciar la forma. Era como una garra monstruosa salida directamente del techo, que adoptaba el color de este, y de cada uno de sus cinco dedos afilados salía un brillante hilo que se difuminaba en el aire. | |
| | | Cero
Edad : 31 Mensajes : 90
| Tema: Re: El contacto. Lun Abr 09, 2012 6:47 pm | |
| Abrí los ojos con sorpresa, aunque poco después agudicé la vista, lo que estaba viendo parecía real, se trataba de un lagarto invisible con mano visible.
- ¡Mirad! - Señalé con el dedo índice hacia aquella garra.
Me acerqué un poco, ignorando completamente la presencia de la mujer y el hombre que causaban tanta... tensión en el ambiente.
No sabía qué hacer, pero tenía que hacer algo. Cogí la espada que tenía en la espada, la desenvainé y la levanté hacia el techo, intentando clavarla en esa garra. En caso de no poder alcanzarlo, lo intentaría saltando; si así tampoco pudiese. Acabaría rindiéndome, envainando la espada, y lanzándole un Clair ëm yäk. | |
| | | Heylel
Edad : 36 Mensajes : 1009
| Tema: Re: El contacto. Lun Abr 09, 2012 8:30 pm | |
| Mi ataque causa el rebuelo esperado, pero el hombre no se mueve y su rebote me hace sospechar lo que había estado temiendo por su estaticidad. En cuanto el brazo se le cae sin mayor reacción que un sonido seco en contacto con el suelo, se confirma que aquello es un señuelo.
Escucho a Cero señalando el techo y me pongo en guardia, alejándome los justo del monigote de la mesa y con las tonfas a punto. Miro a la mujer unos instantes, no parece estar muy contenta con la situación. Sea lo que sea, espero que de la cara pronto.
-¡Sobre todo, cubridla, por favor! -Indico a mis compañeros, pues recuerdo las amenazantes palabras de la mujer: "Si se escapa o si sufro algún daño, sea el que sea, ya podéis decirle a Aren Darvenwish que venga en persona a suplicarme que acuda al palacio" | |
| | | Cassandra
Edad : 36 Mensajes : 323
| Tema: Re: El contacto. Miér Abr 11, 2012 10:21 pm | |
| Bocanegra vió impresionada a Heylel mas por el hecho por el estruendo que el hechizo de este causo contra la pared, ya que había pasado de largo ante el hombre. Justo entonces la pequeña almorrana o también llamado Cero pegó un berrido que hizo que las membranas de la piscis vibrasen ante las ondas de la voz del crío.
La Capitana se dignó a rotar sobre su eje y, entornando los ojos pudo diferenciar que había algo en el techo que adquiría el tono de la superficie que tapaba, era como... ¿tenia forma de mano? era como una mano hecha de cristal. Una cosa bastante extraña.
Entonces la advertencia de Heylel la puso en alerta. Asintió con la cabeza y, agarrando una silla con fuerza, la lanzo hacia la mano con el fin de darle, aunque era rabastante difícil porque era tansparente.
Frunció el ceño. Aquella mujer había demostrado su fuerza. No necesitaba ningún tipo de protección, de todos modos, la Capitana lanzó un Nairea hacia la mujer caeruleus para, al quedar cubierta por densa niebla, la mano no podría verla ni localizarla... no se le había ocurrido otro modo de proteger a aquella mujer.
Ahora se centraba en el combate, con Korvas con ansias de corte, se subió a la mesa para estar más cerca de la mano... pero era muy difícil darle ya que su enemigo era invisible.
Maldijo a Mithos y a su madre y, sacando la tinta de calamar que le quedaba en su bolsa, y con la que su cara se ocultaba en estos momentos, lanzó su contenido hacia donde supuestamente estaba la mano, con el fin de hacerla visible y que el resto de sus compañeros pudiesen atinar.
Una líder siempre tiene que pensar en todo. | |
| | | Alehyss
Edad : 30 Mensajes : 3185
| Tema: Re: El contacto. Jue Abr 12, 2012 4:26 pm | |
| La expresión de la mujer caeruleus me hace darme cuenta enseguida de que esto no es un juego ni para nosotros ni para ella. Trago saliva y me vuelvo hacia el grupo, percatándome enseguida de que no es momento para actuar como una arrogante.
El ataque de Heylel parece ser lo que lo pone todo en marcha, pues tras el hechizo el hombre sentado sigue inmóvil, como un cadáver. Sin embargo, yo juraría que lo he visto moverse en alguna ocasión. Me resulta muy extraño lo que estamos viviendo.
Cero grita, transportando nuestras miradas al techo. Primero no alcanzo a ver exactamente qué mira el chico, y me lo tomo como si fuera una de esas imaginarias hadas que parece ver a todas horas, pero al verlo tan obcecado atacando pronto me percato de que sí hay algo, solo que parece camuflarse a la perfección con el tono del techo. Es una especie de mano con afiladas garras de las que brotan como unos hilos que se disuelven en el aire.
¿Hilos?
Bocanegra lanza una bolsa con tinta, con la misma que se pintó la boca, a esa extraña mano fantasmagórica.
- Bien hecho -murmuro, admitiendo que por una vez la mujer ha hecho algo en lo que yo no hubiera pensado, reconociendo así su trabajo.
Estrecho los ojos. ¿Una garra en el techo? ¿Hilos? ¿Dónde está el sentido de...?
Bajo mi vista al hombre de la mesa. ¿Acaso no se había movido en elgún momento? ¿Y si...?
Agarro con fuerza mi arma y me lanzo corriendo contra el hombre inmóvil. Cuando estoy a punto de alcanzarlo alzo la hoz de mi kusarigama y realizo un movimiento diagonal de arriba abajo con mi mano, con intención de cortar su torso. Hay algo que quiero comprobar... | |
| | | Lloyd
Edad : 33 Mensajes : 2032
| Tema: Re: El contacto. Vie Abr 13, 2012 6:27 am | |
| Retrocedió un par de pasos cuando el aether conjuró un aethes y alzó las cejas, ligeramente sorprendido. Sin embargo, esta sorpresa inicial no tardó en dar paso a la confusión. Con el ceño fruncido, observó con desconcierto al hombre quien, a pesar de haber recibido el hechizo del aether, permanecía inmóvil.
Fue entonces cuando el claritas gritó. El chrysos torció el cuello para mirar a su compañero y luego, siguiendo la dirección señalada por el joven, alzó la cabeza y clavó sus ojos en el techo, donde buscó aquello que el claritas parecía ver con claridad. Empequeñeció los ojos y escrutó la zona, mientras se preguntaba si no sería una invención del chico. Tras unos largos segundos de búsqueda (en los que comenzó a dar por hecho que el claritas alucinaba), fue capaz de identificar algo: una especie de mano de la que parecían salir hilos. Frunció el ceño. Si aquello que veía era, realmente, una mano con hilos, aquel hombre inmóvil podía ser...
Alzó ambas cejas. Bocanegra lanzó una bolsa con tinta al punto donde estaba situada la garra. El chrysos la miró de reojo, y luego clavó sus ojos en el hombre al que antes habían rodeado. Antes de que pudiera pensar algo, Alehyss se lanzó, armada, contra el hombre. El chrysos observó durante unos segundos su avance, antes de volver a retroceder hasta situarse a escasos metros de la mujer caeruleus (obedeciendo, de alguna forma, la orden que Heylel había dado). Pese a que tenía el arma entre las manos, decidió no atacar a la garra que avanzaba por el techo (como habían hecho Bocanegra o el claritas) y se limitó a observar la situación. Tampoco era que pudiese hacer mucho más, teniendo en cuenta que buena parte de su estilo se basaba en el combate cuerpo a cuerpo.
Fdr. cutrrre ~ | |
| | | Narrador
Mensajes : 1439
| Tema: Re: El contacto. Mar Abr 24, 2012 9:58 pm | |
| Gracias a la información del disperso Cero, finalmente todas las vistas habían dado con aquella especie de garra que se camuflaba con el techo. Si bien les pareció extraña a todos, cada uno de los guerreros adoptó sus propios métodos para enfrentarla.
Cero, que había sido el primero en vislumbrarla, intentó alcanzarla con su espada, pero la zarpa se desplazó como si se tratase de una araña, evitando la punta de aquello. Al desplazarse sobre sus cinco afilados dedos, los propios hilos brillantes que de ellos descendían y se disolvían en el aire la acompañaron. Sin embargo, en lo que se movía, el extraño miembro fue incapaz de evitar la tinta de calamar que le lanzó Bocanegra, aunque sí esquivó la silla, que cayó de nuevo al suelo y se partió en varios trozos. La tinta impactó contra el cuerpo de la mano, haciéndola diferenciable del fondo.
A sus espaldas, la mujer caeruleus frunció el ceño.
Cero, que no había conseguido alcanzar al ser con su espada, disparó un Clair ëm yäk, que la golpeó en el centro. En respuesta, la mano correteó de nuevo, escapando del chico.
Mientras el monstruo del techo era atacado por Cassandra y Cero, el resto se tomó unos instantes para reflexionar. Lyam escudrió a aquel ser, tratando de encontrar algo que explicase lo que sucedía. Incluso llegó pronto a relacionar al hombre sentado a la mesa con los hilos que surgían de los dedos.
Alehyss, que parecía haber llegado a una conclusión similar, decidió actuar, sin embargo. Se lanzó contra el hombre solitario y, cuando llegó a su altura, alzó su arma para cortarlo, pero antes de poder alcanzarlo con el filo el cuerpo del hombre se levantó con velocidad, aunque inerte. Todos vieron como en un instante se alzaba, llegando a levantarse del suelo unos centímetros, y se apartaba de la trayectoria del golpe de la chrysos, evitándolo sin probemas. Al instante, como movido por hilos, flotó un metro a la derecha de la chica, alejándose, y osciló con velocidad hacia ella de nuevo, extrayendo un cuchillo de un bolsillo y apuntando al vientre de la chica mientras su cuerpo volaba hacia ella, que acababa de darse la vuelta y tenía apenas un instante para reaccionar.
Todos pudieron ver que el rostro de aquel hombre que atacaba no cambiaba en ningún momento. Estaba muerto.
Heylel, que junto con sus compañeros trataba de resolver aquello, parecía más preocupado por proteger a la mujer. Se vió sorprendido, como los demás, por el suceso, pero cuando tenía intención de correr para hacer algo notó que una de sus piernas no respondía correctamente a sus deseos. Parecía como si algo la atara o la dominara a la vez que él, impidiéndole moverse con agilidad. FdR- Siento haber tardado tanto, pero estoy mal de salud y además con un montón de trabajo. Mis disculpas. No volverá a pasar. | |
| | | Cero
Edad : 31 Mensajes : 90
| Tema: Re: El contacto. Jue Mayo 10, 2012 8:12 pm | |
| Aquella mano de monstruo tan horrorosa continuaba danzando, aunque ahora, gracias a un extraño líquido negro muy tentador que había sido lanzado por la mujer travestida payasa, podíamos diferenciarla del fondo.
Me distraje un momento después de que mi hechizo golpease aquella cosa, y pude ver como uno de los hombres que estaba sentado flotaba en el aire como si de una pluma se tratase. Parecía que estaba muerto, pero eso no podría ser, pues danzaba como si de una bedet se tratase.
No estaba seguro de qué hacer, pero bueno, tenía que actuar, así que seguí a la mano, que era más interesante. No la encontraba, hasta que vi una mancha negra por ahí deambulando. Cogí otra vez la espada y empecé a seguirla, lanzandole dos estocadas. | |
| | | Narrador
Mensajes : 1439
| Tema: Re: El contacto. Jue Jun 28, 2012 11:34 pm | |
| La extraña mujer caeruleus hizo un mohin mientras enfocaba a los guerreros. De pronto, como si un pensamiento viniera a su mente por arte de embrujo, una pérfida sonrisa asomó a sus labios. Comenzó a acercarse a los muchachos con lentitud, resonando cada uno de sus pasos en el suelo con sensual sonoridad.
- Ahora que lo pienso... -dijo relamiéndose los reptilianos labios, distrayendo a los guerreros de la batalla por un instante-. Creo recordar que en Brönte está él.
La mujer retiró uno de sus mechones blancos que caía sobre su rostro de este. Todos pudieron percibir entonces que la habitación comenzaba a ensombrecerse y la temperatura bajaba de pronto. Se encontraron con que "anochecía" en aquel sitio. El tiempo pareció detenerse para los que no eran la mujer o los guerreros.
- Vámonos de aquí -dijo la mujer, sonriendo-. Creo que hay una cosa que llevo queriendo hacer desde hace mucho tiempo.
La dama comenzó a caminar fuera de la posada, mientras nada se movía a su alrededor. Pronto, los asombrados guerreros la siguieron hasta salir de aquel lugar. FdR- Disculpad por el decaimiento del foro... Todos los moderadores lo sentimos y pedimos disculpas. | |
| | | Nagorr Jefe de Raza
Edad : 58 Mensajes : 411
| Tema: Re: El contacto. Jue Jun 28, 2012 11:44 pm | |
| ¡¡FELICIDADES!! ¡¡HABÉIS CONVENCIDO AL CONTACTO PARA QUE VENGA AL CASTILLO!! (Al fin y al cabo en la misión no se decía nada de derrotar monstruos). Por parte del jefe Nagorr Brumm la misión está cumplida y todos los participantes reciben 1 PUNTO DE EXPERIENCIA y una unidad de PIEDRAS DE NÉBULA. - Spoiler:
Piedras de nébula: Objeto de un solo uso. Al lanzarlo contra el suelo explota creando una densa nébula blanca que tarda tres minutos en disiparse. Es imposible ver nada a tres pasos o disiparla hasta que lo haga por sí sola. Cassandra: +1 exp. Piedra de nébula. Alehyss: +1 exp. Piedra de nébula. Lyam: +1 exp. Piedra de nébula. Cero: +1 exp. Piedra de nébula. Heylel: +1 exp. Piedra de nébula. | |
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| Tema: Re: El contacto. | |
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