Templo de Humus.

A pesar de ser la más pequeña de las razas, las construcciones de los parvus no han sufrido efecto por este motivo. Más bien al contrario; la grandiosidad de la arquitectura parvus no tiene parangón. Muestra de ello es el principal Templo de Humus, una interminable sucesión de galerías subterráneas de paredes sin pulir y enormes columnas naturales, unión de estalagmitas y estalactitas, que se extiende a lo largo de kilómetros. Se trata de un templo imponente, el más grande de todo Mithos, adornado con piedras preciosas y que podría acoger a la mitad de la población del continente. Es un lugar religioso de enorme importancia, la ambición de cualquier sacerdote de Mithos, y no sólo la arquitectura del lugar tiene prestigio, sino que la instrucción religiosa que allí se recibe es de primerísima calidad. Posee varios pisos y una enorme cúpula central, de dimensiones imposibles de crear de no ser por la habilidad y la magia de los pequeños habitantes de Humus. Esta cúpula emerge al exterior en mitad de la Ciudad del Cristal, siendo éste el único punto del templo que recibe luz natural.