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| Las primeras pistas [Misión de trasfondo] | |
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Autor | Mensaje |
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Nagore
Edad : 30 Mensajes : 298
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Sáb Ago 30, 2014 3:13 am | |
| Chillo de nuevo, cayendo de culo al suelo debido a aquel repentino movimiento de tierra. Maldición...
Miro hacia la derecha y observo como mi Terra Der simplemente ha desaparecido y, en su lugar, tengo a aquel monstruo cada vez más cerca mía.
Chillo más fuerte, si cabe y echo a correr lo más rápido que puedo. Creí que protegerme tras pinchos y atacar de lejos sería más que suficiente teniendo en cuenta que todos nuestros rivales atacan de forma directa, sin embargo, parecía que aquello no me había salido bien y, aún por encima, me había llevado una buena bronca de mis compañeros. Ahora debía recompensarles: utilizo toda mi velocidad a máxima potencia para correr y situarme lo más cerca posible del parvus de los guantes, saltando de piedra en piedra evitando las grietas para sacar otra bolsita y coger un puñado de cristal machacado en pequeñísimos fragmentos, tomar aire profundamente y soplárselos a la cara con mi mayor fuerza con el fin de que todas aquellas partículas de cristal se le metiesen en los ojos preferiblemente y le cegasen. Sino... siempre podría respirarlos y sufrir desde dentro.
Intento además darle una patada. Maldición...
FDR: Habilidad "Atletismo" activada en este post. FDR: e.e véase que todo son armas anti-violadores XDDDDDDDDDDDDD spray de pimienta pawa XD | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Dom Ago 31, 2014 6:47 pm | |
| Después de ver lo que le pasa al suelo, me siento tan oportuno como de costumbre. Sin embargo, mi afrenta contra el monstruo no es muy afortunada. Cuando noto como se traga mi arma sin ningún daño aparente, me sorprendo y frunzo el ceño, tratando de tirar en sentido contrario.
La fuerza que hace me empuja hacia mis compañeros. Estas moles parecen imparables. Por un momento me paro a pensar en los abrojos, pero creo que unos pinchitos en los pies son lo mejor que puede pasarme si a esta cosa se le da por mover esa bola de hierro.
Acabo apoyando el pie derecho contra su pierna para hacer fuerza y tirar hacia a mí con las dos manos, tratando de arrancar mi espada. Hago entonces dos chrysantaes -uno con cada mano- para intentar achicharrar a este bicho. Espero que la magia le haga algo más que la espada.
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| | | Cierzo
Edad : 31 Mensajes : 911
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Dom Ago 31, 2014 11:31 pm | |
| Al parecer, los enemigos a ambos lados del pasillo estaban resultando problemáticos, pero yo no podía hacer mucho al respecto; ya tenía dos hombres manifiestamente poderosos de los que encargarme ante mí.
Cuando el de los puños hizo abrirse el suelo, salté a la izquierda, tratando de evitar la grieta. Casi al tiempo, su compañero me había lanzado su arma. Con un poco de suerte, el propio salto habría servido para evitar también el hacha. En caso contrario, contaba con un ntendbit que ya había conjurado de antemano, y que bien podría protegerme de aquel ataque. Por otra parte, debía prestar atención al arma a partir de aquel momento, ya que mantener a un enemigo desarmado era un punto a favor.
Si no necesitaba el ntendbit para protegerme, lo lanzaría contra el de los puños, que parecía más desprotegido. En caso contrario, conjuraría uno nuevo para lanzárselo. El siguiente ntendbit que conjurase iría, por otra parte, directo a su compañero.
Parecía que el crío ni siquiera era capaz de mantenerse firme ante un enemigo, sino que se dedicaba a estorbar por todo el campo de batalla donde más lo viera conveniente. Así pues, a partir de aquel momento debía prestar atención también a la bestia que el enano había dejado sin vigilancia, y que cada vez estaba más cerca.
-¡Niño, céntrate en alguno y deja de meterte en medio! -le gruñí, ya harto de tanta inconstancia. | |
| | | Narrador
Mensajes : 1439
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Sáb Sep 06, 2014 2:04 am | |
| Brraska Larr El pequeño encapuchado no pudo resistirse a las turbulencias del golpe del parvus, cayendo al suelo y rascándose las piernas contra los afilados cantos de las piedras que habían saltado al romperse. Una de ellas se clavó en su brazo derecho, un poco antes de la muñeca, y qué incrustada en su carne. La enorme bola de hierro se clavó en el suelo casi por completo y a criatura parecía tener dificultades para extraerla. Puedo escapar del golpe del mangual gracias al empleo de su velocidad y su habilidad manual hizo que el parvus apenas pudiese reaccionar para cuando le había soplado los cristales. Al momento cerró los ojos y gritó a causa de la irritación, retrocediendo un par de pasos. La patada del encapuchado se clavó en su nariz, generando un ruido desagradable y otro grito del hombre, que tosía y maldecía. Pero el golpe le permitió calcular la distancia a la que estaba de él y, con un salto, lanzó un puñetazo a su estómago, haciendo volar al pequeño encapuchado un metro hacia atrás. El golpe le cortó la respiración por un momento y la caída hizo que algunos de los abrojos se le agarrasen a la capa, picándole en la espalda y brazos con algunos de sus movimientos. El parvus caminó hacia el encapuchado, buscándolo con dificultad a causa de la ceguera y con intención de rematarlo con un último puñetazo. Cierzo consiguió salvar la caída entre los cantos saltando hacia la izquierda -pisando algunos de los abrojos que se había acumulado en ese lado que apenas resultarían una molestia- y haciéndose algunos cortes en los gemelos a causa de las punzantes piedras que se habían alzado. El hacha que le hombre había lanzado contra él llevaba la fuerza suficiente como para atravesar el conjuro cortante, pero pese a todo su trayectoria se vio desviada y el aether no sufrió daños. El parvus que ahora no contaba con su hacha se lanzó al suelo, todavía envuelto en roca, y el ntendbit impactó contra él, pasándole por encima y recorriendo su espalda, haciendo que la piedra se resquebrajase por esa zona y su piel quedase al descubierto. Luego se levantó y extendió la mano haciendo que su hacha volviese con fuerza hacia ella y fue de nuevo hacia Cierzo, con pasos pequeños y rápidos, para dar un gran salto enarbolando el hacha y lanzándosela de nuevo la cabeza. Los forcejeos de Gerald con el monstruo no dieron demasiados frutos y éste continuó caminando y empujándolo hacia atrás, inmutable. Los chrysantae, sin embargo, hicieron que el monstruo se detuviese y sus sonido metálico se volviese más alto y agudo. Su vientre pareció recuperar la fluidez inicial y la espada salió en uno de los tirones de Gerald que, con la inercia, cayó hacia atrás clavándose en la espalda y trasero algunos de los abrojos del suelo y agravando el dolor de la lesión adquirida en el ascenso de la montaña. En ese justo momento, Gerald vio como el monstruo había clavado su mangual en el lugar donde él estaba apenas unos segundos antes con una velocidad inimaginable. Antes de que pudiese pensar en lo que había visto, el monstruo barrió el suelo con su bola de hierro golpeándole el pie derecho y haciéndolo girar en el suelo, llevándolo hacia el centro. Tras eso, emitió un nuevo sonido metálico y retomó su marcha, ahora a ritmo humano. | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Sáb Sep 06, 2014 2:18 am | |
| Parece que la magia sí hace algo contra esta cosa y salgo despedido hacia atrás pudiendo recuperar mi katana. Al caer emito un gruñido molesto a causa del dolor del espalda. Los abrojos también me han jodido lo suyo, sobre todo en las quemaduras que aún tengo de los babociélagos, pero este dolor de espalda me está poniendo ya de mal humor.
Apenas he levantado la vista, la mole ha clavado su arma en el suelo, justo donde yo estaba hace un momento. ¿Ha sido un golpe completo? ¿Cómo ha sido así de rápido? Pero no me da demasiado tiempo para pensar, pues siendo un intenso dolor en el pie que me zarandea en el suelo, echándome más cerca de Cierzo. Mierda, ¿cómo voy a prever sus acciones si su capacidades son tan aleatorias? Aunque lo que parece es que se basa en la acción-reacción. Espero que sea cierto...
Trato de ponerme en pie lo más rápido que puedo, dejando la espada en el suelo y sacando el cuchillo. Ahora avanza con paso normal, con lo que no me queda demasiado tiempo. Si el estómago es resistente, entonces tendré que buscar las juntas de la coraza. Acción-reacción, venga. Paso el cuchillo a mi mano derecha.
Tomo aire y me lanzo hacia él, hacia su hombro izquierdo, el que pretendo utilizar como punto de apoyo -haciendo fuerza en él con mi mano izquierda- para saltar por su lateral izquierdo y aprovechar la inercia del giro para clavarle el cuchillo en la junta de la nuca; luego rajaré hacia a mí esperando que tenga algún tipo de sistema nervioso. Preparo un chrysantae en la mano del cuchillo para enviarlo en cuanto lo clave en él. Con suerte, al menos, me cubriré mejor de su mangual.
Escucho los gritos de Cierzo. Eso es que le va bien. | |
| | | Nagore
Edad : 30 Mensajes : 298
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Lun Sep 08, 2014 1:06 am | |
| Un primer fallo por mi parte hace que una piedra me haga sangre en el antebrazo, lo que me hace gemir de dolor. Maldición... ahora sabrán que me he metido en una pelea. Mis artimañas funcionan y ciegan a mi rival. Además mi patada es acertada y una corriente de excitación recorre mi espalda. Este es mi primer combate en serio y estoy muy nerviosa. Nerviosismo y positivismo que se escapan en forma de aire de mi cuerpo en cuanto aquella patada me alcanza. Quedo tumbada en el suelo, arrancándome un par de pinchos de la capa rápidamente. Cuando alzo la vista, veo que lo tengo casi encima, por lo que conjuro un Terra Der intentando concentrar toda mi magia en él. Aprieto mucho los ojos. Me paso los días estudiando magia. ¡De algo tendrá que servir, maldita sea! Ni me fijo en el resultado de mi hechizo. Me levanto rápido y me aplasto la capucha contra la cara, para luego conjurar un Pervatia en frente de Cierzo para protegerle del hacha que se dirige hacia él. Así él tendrá más capacidad de movimiento y reacciones si no tiene que preocuparse por el hacha. Respiro, agotada. Ya no puedo más... | |
| | | Cierzo
Edad : 31 Mensajes : 911
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Miér Sep 10, 2014 4:18 pm | |
| Al saltar para esquivar el ataque del parvus di con los abrojos bajo mis pies, y contuve a duras penas un gesto de furia. Estúpido crío. Más valía que nos deshiciéramos de él por las buenas cuando tuviéramos oportunidad, o acabaría yo personalmente deshaciéndome de él por las malas.
No era aquel momento de deshacernos de él de ninguna forma, pues otro parvus aún más puñetero mantenía mi atención. Conseguí rasgarle la espalda, pero se levantó antes de que tuviera oportunidad de lanzar otro hechizo al mismo punto. Cuando lo vi tratando de recuperar el hacha lancé un ntendbit directo a sus manos, dispuesto a dificultarle el hacerse con su arma de nuevo en la medida de lo posible.
En cualquier caso, la lanzó de nuevo contra mí. Traté de agacharme un poco para esquivarla, intentando que eso no supusiera más problemas con los abrojos. De todas formas, conjuré un ntendbit en las manos, como precaución. Si el esquivar el arma era suficiente para que no me alcanzase, lanzaría el ntendbit contra él. En caso contrario, utilizaría mi hechizo de escudo, tal y como había hecho la última vez. | |
| | | Narrador
Mensajes : 1439
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Sáb Sep 20, 2014 9:35 pm | |
| Brraska LarrA pesar de su dolor, Gerald asumió el comportamiento del monstruo y actuó en consecuencia: atacando a un punto teóricamente vital esperando que ya no pudiese hacer una reacción a sus movimientos. La agilidad del chrysos le permitió saltar sobre su enemigo, que ahora parecía moverse como más ligero, y atacar a su nuca, donde encontró un punto estrecho donde la coraza se dividía, pero el cuchillo no se hundía como en su tronco. El monstruo soltó un nuevo grito metálico, pero en cuanto el chrysantae atacó la zona junto al corte, repitió otra secuencia de sonido más grabe, sin que el sonido anterior hubiese terminado. Cuando fue a seguir caminando, el cuerpo se le detuvo y calló hacia adelante a causa de la falta de apoyo. A su vez, la otra bestia idéntica había logrado arrancar su mangual del suelo, pero en el momento en el que una se detuvo, la otra sufrió la misma suerte. La del lado derecho, en lugar de caer, simplemente se detuvo en su lugar para no volver a moverse. Debido a la pérdida de visión, el parvus no vio venir el ataque de su pequeño contrincante y el terra der golpeó de pleno la cara del parvus, hundiendo su nariz y haciendo que cayese de espaldas sin volver a respirar. Quedaba sólo uno y éste había lanzado su enorme hacha hacia Cierzo. El hechizo del joven guía no fue lo suficientemente alto como para evitar la trayectoria del hacha, que llevaba un ángulo demasiado cerrado, pero sí sirvió para que el parvus, en su salto, chocase con el tronco sobre su borde de forma brusca y dolorosa. La roca que lo rodeaba se resquebrajó y soltó en su mayor parte y el parvus no pudo evitar escupir algo de líquido estomacal sobre Cierzo. El aether pudo salvar su integridad al apartarse de la trayectoria del arma, pero el hacha era tan grande que, aún pareciendo que podía esquivarla al completo, cortó su hombro izquierdo en uno de sus giro rápidos antes de clavarse en la tierra abierta. Por último, mientras el parvus trataba de recuperarse, Cierzo remató su afrenta con un último ntendbit que lo cogió de lleno, lanzándolo a varios metros y haciendo que cayese sobre su cabeza y su cuello se doblase acompañado de un crack desagradable que no lo dejó volver a levantarse. Tras eso llegó al fin la calma y los tres combatientes pudieron tomarse un respiro. La puerta por la que habían llegado había desaparecido y ahora tenían tres caminos frente a ellos. Tanto si querían buscar al alquimista como si querían salir del lugar, no les quedaba otra que continuar hacia adelante por alguno de los estrechos pasillos. | |
| | | Nagore
Edad : 30 Mensajes : 298
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Sáb Sep 20, 2014 10:08 pm | |
| Acabo por sentarme, respirando fuertemente por la boca. Las manos me tiemblan por el cansancio y la excitación. Alzo... alzo un poco la vista y le veo, llevándome las manos a la boca, incrédula. -Lo he... lo he matado...- Afirmo más que pregunto. Es la primera persona a la que mato y estoy aterrorizada.
Me levanto, sucia y con las rodillas temblorosas y corro a junto los chicos. Parece que todo les ha salido bien. Me coloco en frente de ellos con la cabeza gacha.- Siento lo de los pinchos.- Musito, avergonzada.- No era mi intención.- Me disculpo.
Los recojo rápidamente y los devuelvo a su bolsa, mientras ellos debaten qué camino escoger. una vez acabo, doy mi opinión. - Yo... yo no iría por el del centro.- Me explico. Prefiero tener un sólo flanco abierto que dos. Aunque... haced... haced lo que queráis.- Río tensa. Por hoy ya he metido bastante la pata.
Me coloco de nuevo cerca de ellos, callada y silente. No seré yo quien dé el primer paso. | |
| | | Cierzo
Edad : 31 Mensajes : 911
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Lun Sep 22, 2014 11:11 pm | |
| No tuve mucho tiempo para asquearme por lo que me habían echado encima. Cuando el hacha pasó por mi hombro, abriendo en él una herida, ahogué un gruñido de dolor y me empleé con más fuerza, acabando con aquel insistente rival apenas algo después. Para cuando quise buscar un nuevo objetivo, me encontré con que todo había parado ya.
Como pude, examiné un momento la herida, aunque no había gran cosa que pudiera hacer respecto a ella. Me limité a asegurarme de que no sangrara en exceso y a cubrirla en la medida de lo posible, para evitar que entrara en ella la suciedad. En cuanto a la mancha de mi ropa, saqué gran parte de ella absorbiéndola en un pequeño ntendbit, que luego estallé junto a una de las paredes, sin demasiada fuerza.
Me volví hacia Gerald, ignorando a crío, que bastantes problemas nos había causado con sus opiniones e iniciativas.
-¿Qué hacemos? -gruñí, malhumorado. | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Dom Oct 05, 2014 12:58 pm | |
| Parece que el ataque deja tonto al montruo. Me giro rápidamente para mirar al otro, pero se detiene también. De pronto hay una enorme calma con lo que asumo que este encontronazo ha terminado. Respiro un momento, descansando y me froto el tobillo con cierta calma, tratando de aliviar algo de dolor. Lamentablemente el fuuchi no me va a resultar muy útil para esto. Siento como algo me aprisiona lentamente en torno al dolor que acarreo en la espalda y trato de estirarme y no pensar en ello. Luego me arranco los abrojos que me quedan por la ropa.
Me acerco a los otros dos, estirando los hombros y movimiento el cuello para luego guardar el cuchillo de nuevo en mi pierna, bajo la bota. Miro primero la herida de Cierzo y hago un fuuchi para que al menos no le quede abierta.
—Mejor que nada —Comento, apaciguante. Pongo los brazos en jarra y miro al enano, luego a Cierzo, que pregunta qué hacer. Miro hacia los tres caminos.
—Pues tú y yo, empezar a buscar —Le comento a Cierzo. Luego miro al chaval. —Y tú podrías ser útil y buscar una salida. Se supone que los parvus sabéis de tierra y esas cosas —Le aclaro. Vuelvo a dirigirme a Cierzo que es quien me interesa.
—Parece un sitio bastante amplio así que apostaría por dividirnos y encontrarnos aquí en una hora. Si no sacamos nada, nos largamos a buscar una salida aunque nos tengamos que poner a cavar esta pared —Indico, señalando con la cabeza el muro de tierra y piedra en el que antes estaba la escalera. —Si alguno no vuelve pasada una hora... queda a libre criterio —Indico con una media sonrisa socarrona.
—Me voy por la izquierda. Nos vemos en una hora —. Echo a andar.
Última edición por Gerald el Dom Oct 05, 2014 1:37 pm, editado 1 vez | |
| | | Nagore
Edad : 30 Mensajes : 298
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Dom Oct 05, 2014 1:33 pm | |
| Escucho en silencio con algo de presión en la garganta y asiento. - Lo... lo intentaré.- Musito alicaída. -Buscaré una salida.
Separarme de ellos no me hace mucha gracia. Estoy extenuada y me tiemblan las piernas. Sin embargo no pongo ninguna objeción. No creo que esté en situación de hacerlo.
Aprieto los labios y respondo a continuación.- Derecha.- Digo dando unos pasos rápidos hacia esa dirección.- Nos vemos al cabo de una hora.- Susurro, ajustándome mejor la capucha y echando a correr por el camino que me toca, contando sesenta veces sesenta lo más concentrada posible para no perderme (utilizando los dedos también) para calcular el tiempo.
Les pierdo de vista y me acongojo aún más. | |
| | | Narrador
Mensajes : 1439
| Tema: Re: Las primeras pistas [Misión de trasfondo] Miér Abr 08, 2015 11:57 pm | |
| El viajeLos tres se dividieron nuevamente, tratando de buscar algo de información y la salida de aquel lugar infernal. Cierzo recorrió varios pasadizos, encontrándose con algunos enemigos por el camino. La mayoría eran parvus, aunque también había gente de otras razas. No fueron enemigos fáciles de solventar, pero el guerrero pudo deshacerse de ellos para continuar recorriendo la zona. Llegó un momento que su orientación se vio engañada por las encrucijadas de los túneles y consiguió perderlo durante un buen rato. Por suerte o por desgracia, dio con una sala donde varias mujeres permanecían encerradas con signos de violencia junto con varias cajas de drogas y joyas. Entre ellas, haciendo algunas preguntas, dio con una que supo decirle algo del hombre al que buscaban. Al parecer, alguien había dicho que llevaba ya tiempo en Caligo, recolectando a sus antiguos seguidores y aprendices. Aquí quedaba uno de sus imitadores, pues llevaba años utilizándolos para que no le siguiesen el rastro. Varios hombre dieron con él cuando todavía estaba en la sala. El revuelo de su paso había ido atrayendo a más gente de los túneles. Cierzo se enfrentó a los cuatro que vinieron por él aprovechando el pequeño espacio de la sala. Lamentablemente dos de las mujeres murieron a causa de los ataques de los hombres durante la pelea y Cierzo fue perdiendo fuelle cuando todavía quedaban dos de sus enemigos. Una ve frente al último, cuando su mirada todavía guardaba la frustración de no conseguir llegar a acabar con el último, el hombre calló con la cabeza abierta en dos frente a sí y el pequeño guía de capucha apareció por la puerta indicándole que ya había encontrado una salida. Cierzo instó a la última mujer a acompañarlos, pero ésta, pese a su aparente libertad, afirmó que ya no podía hacerlo. Cierzo observó los pinchazos en sus brazos y comprendió antes de marcharse con el chiquillo. Ambos recorrieron el lugar guiándose por el olfato del parvus y comenzaron a escuchar ruido de multitud coreando una pelea y gruñidos de bestia. Se aceraron con sigilo y descubrieron de qué se trataba. Gerald, en su carrera por encontrar algo útil en aquel odioso lugar había dado con varios enemigos en distintas salas y lo más que pudo encontrar fue una sala de pociones donde recolectó los papeles que parecían útiles y un mapa innominado marcado con un recorrido que no supo reconocer de entrada. No daría cuenta hasta más tarde de que entre los papeles se encontraba una carta similar a una invitación que rezaba abajado del todo "Mithos nos guía". Una vez salió al pasillo -anteriormente vacío- dio con un grupo de hombres que hablaban sobre el revuelo que unos "intrusos" estaban causando. Al momento, el grupo de unos siete individuos se lanzó a atacarle y pese a que trató de escaquearse y noqueó a alguno, un fuerte ataque causado por la maldición lo dejó inconsciente a manos de aquella gente. En cuanto se despertó se encontraba en una enorme jaula redonda, de arena y techo bajo y frente a él estaban soltando a un ogro de unos dos metros. Alrededor la gente gritaba y coreaba a la bestia. Le salvó que fuese lento, torpe y bastante bobo para poder poder derribarlo, con la suerte de que su caída logró destrozar la jaula y crear la confusión suficiente para que sus camaradas fuesen en su ayuda y pudiesen escapar de aquel lugar. La mala noticia fue que tuvo que recolocarse el tabique en caliente después del duelo. Siguiendo al pequeño guía y su recorrido de hombres noqueados por el suelo, lograron huir de sus perseguidores y dar con un pasadizo que los llevó a claro en las afueras de la ciudad, ya fuera del muro de piedra que la rodeaba. En cuanto estuvieron en los límites de Humus, el pequeño guía se separó de ellos para tomar un rumbo diferente mientras ambos guerreros pusieron en orden sus ideas e información para dirigirse a su siguiente destino: Caligo. ***La sombra del brujoTras atravesar el mar con unos mercaderes en ruta y sufrir las consecuencias de la mar picada por el viento, llegaron después de dos días al puerto principal de Caligo. Allí el chrysos rememoró vivencias e incluso dio con algún conocido y el aether disfrutó del exotismo de la gran ciudad. Antes de reemprender la búsqueda se tomaron un tiempo para descansar y recuperarse además de disfrutar de las borracheras diurnas con el vino caeruleus. Tuvieron la iniciativa de pasarse por el antiguo cuartel de Gerald a ver si su posición y su jeta conseguían darles más pistas del hombre al que buscaban, pero la confidencialidad de Caligo era hermética y lo único que consiguieron fue una insinuación de uno de sus antiguos superiores, instándolos a preguntar a los campamentos de renegados y refugiados que extraoficialmente se mantenían cercados en lo profundo del bosque. Si tenían agallas suficientes. Emprendieron rumbo y aunque el bosque resultó un terreno hostil que causó un par de dolores de cabeza a los caminantes a causa del estrés que producían algunos recuerdos en el ya afectado cuerpo de Gerald, consiguieron dar con el claro donde supuestamente estaba el campamento, pero no había nada. El misterio se resolvió cuando un caeruleus de mediana edad les salió al paso y consiguieron ganarse su confianza como para que les permitiese cruzar la barrera mágica que ocultaba el campamento. Una vez pudieron verlo y entrar descubrieron que se trataba prácticamente de una subcivilización escondida de la luz del sol entre montañas. Pese a ser recibidos con recelo, hablaron con los que estaban al mando y trataron de llegar con ellos a un acuerdo. La charla se zanjó con que Cierzo se enfrentaría al hijo del hombre que los había guiado -y líder- en un duelo cuerpo a cuerpo. Si lo vencía, les dirían lo que sabían sobre aquel hombre. Pese a que las artes marciales rudimentarias en las que el muchacho estaba instruido hicieron que Cierzo lo pasase mal en aquella pelea, al final utilizó su perspicacia -y algo de juego sucio imitando al muchacho- para aventajarse de su corpulencia y magia -frente a la delgada constitución del caeruleus- y lanzarlo fuera del círculo de batalla. Tras ésto, los proscritos cumplieron su palabra y los instaron a pasar la noche mientras celebraban el cambio de luna aprovechando para hablar con calma del tema. Los guerreros no sólo sacaron una de las mayores experiencias de su vida gracias a una juerga en un ambiente tan salvaje y primigenio entre viejas costumbres de las antiguas razas, sino que conocieron la leyenda de "El druida negro", un nigromante y mago que decían ser tan viejo como el tiempo, siempre dedicado a la búsqueda del conocimiento ancestral mediante las artes más drásticas. Decían de él que era el único hijo de la raza primitiva que quedaba sobre la tierra y que sus capacidades para hacer y deshacer lo imposible resultaban escalofriantes. Pese a que las historias podrían resultar exageraciones y cuentos de viejas, se sabía que el gobierno caeruleus lo había estado vigilando, protegiendo y ocultando durante generaciones y que la última vez que se le había visto por aquí había sido en cuanto el actual dictador de Caligo había heredado su cargo. Sin embargo, muchos quedaban aún por aquellas tierras que afirmaban ser Christos Salazar, no obstante, ninguno de ellos había sido el real hasta la fecha. Gracias a la información de aquel paradisíaco lugar del que no muchos sabían y al que prácticamente nadie había accedido en tiempos sin una relación previa con alguien de dentro, marcharon junto con su resaca a su nuevo destino: Lumen. ***El fin iluminadoDe los días sin sol a los eternos atardeceres, los guerreros agradecieron la cercanía de las islas cuando supieron que los puertos estaban cerrados y debían pasar a pie por los gigantescos puentes de unión entre países. Lumen era un lugar apacible con gente sencilla. Pese a la cercanía, la estética no tenía nada que ver con Caligo. El estilo de los ropajes inspiraba más cercanía y humildad, el aire estaba colmado de magia hasta el punto de que Cierzo sentía cosquillear la espalda y Gerald sentía la electricidad circular de cuando en vez por la superficie de su piel. Las calles estaban repletas de construcciones hechas con materiales que reflejaban enormemente la luz -cosa que llegaba a resultar molesto para los guerreros- y los carromatos, tiendas e incluso estructura de las calles se alejaban mucho de la metrópoli oscura. La ciudad de Lumen tenía el aspecto de una aldea tranquila, pero la extensión de una enorme ciudad donde el castillo de los reyes coronaba la montaña más alta, acercándose al sol. No pasaron aquí mucho tiempo, sino que pronto descubrieron que debían recorrer el río Luminia en dirección a Rosenthal al comparar un amplio mapa de las tierras de Lumen con el fragmento que tenían y del que no habían discurrido aún la localización exacta. El camino fue largo pero bastante tranquilo. Los bosques eran luminosos al igual que los caminos y pese a que la falta de oscuridad hizo que inicialmente no pudiesen conseguir un sueño profundo y reparador, no tardaron que acostumbrarse a las nuevas circunstancias. La magia del ambiente parecía aliviar sus cuerpos por momentos, mientras que en otras ocasiones les causaba un enrarecimiento del ambiente que los agotaba con mayor rapidez. Llegaron finalmente al lugar marcado: la cumbre de una montaña escarpada a la que les costó verdadero esfuerzo y un par de sustos escalar. En ella sólo se veía una casa vieja y pequeña prácticamente en el centro del claro que había en la cumbre. Nada más. Los guerreros echaron a andar con decisión dispuestos a cruzar la puerta y terminar el recorrido. Sin embargo, al cabo de un rato, dieron cuenta que por más que andaban, la casa se mantenía igual de lejos. Algo hacía que tuvieran la sensación de que se acercaban, pero lo cierto es que nunca llegaban a acortar distancias. Le dieron vueltas a aquello hasta que cayeron en la cuenta de que una barrera protegía la casa. Una vez consiguieron solventarla, el suelo tembló y de la luz blanca mortecina que iluminaba el claro debido al sol directo, surgió una enorme bestia que los dejó sin aliento. Sus patas medirían a lo menos lo que el más alto de los dos y su cabeza podía compararse con la fachada de la pequeña casa. - Spoiler:
Fue una lucha compleja y tediosa que ambos creyeron haber perdido cuando ya las fuerzas les faltaban mientras parecía que a aquel animal se le reponían e incluso acentuaban. Cada golpe que le daban hacía que sus garras hiciesen temblar más el suelo y cada vez que trataban de despistar su atención para que uno se colase en la choza, el animal más veloz se volvía. Finalmente, como último recurso, ambos se lanzaron a las fauces del animal dispuestos a hacer cualquier cosa para conseguir la victoria o acabar con aquella locura y, una vez los gigantescos colmillos los dejaron en sombra, sintieron como si hubiese atravesado una pared gelatinosa. En cuanto vieron a su alrededor estaban dentro de una casa vieja, polvorienta y enormemente desordenada. Todo estaba lleno de cachivaches y artilugios para preparar pociones y practicar conjuros. Ambos se miraron sorprendidos, parecía que habían logrado su objetivo. Se dispusieron a llamar al hombre por la casa y aprovechar la aparente soledad para encontrar algo de utilidad. Cierzo se dedicó al ala norte, rebuscando algunos libretos a mano, mientras Gerald se dirigió a la sur y su cháchara se silenció bajo el marco de la puerta hacia un pequeño despacho. En cuanto su compañero dio cuenta del silencio alzó la vista y dio con su espalda estática. Frente al chrysos se encontraba una silla ocupada por un cuerpo del que apenas quedaban ya los huesos. La figura reposaba sobre el escritorio que tenía delante, como si se hubiese quedado dormido sobre éste y a su alrededor, en el suelo, se veía un círculo de cenizas y runas junto con restos de plumas y sangre. La ropa, la silla e incluso parte del escritorio estaban también carbonizadas. El chrysos acabó por acercarse, todavía sin saber qué creer al respecto y cubiertos por el cuerpo, como si la postura hiciese pensar que lo protegía de las llamas, había un escrito. - Citación :
- “Estoy cansado ya del tiempo y las deudas que tengo con él y los dioses. Estos últimos años no dejan de perseguirme los fantasmas de los estudios que no lograron más que fracaso y destrucción. No me arrepiento de todo lo que he conocido y logrado en este tiempo, pero tampoco quiero estar aquí cuando la energía del mundo se cobre su deuda. Ya no sólo me sigue aquello que yo he engendrado, sino que alguien, alguien de carne y hueso, me vigila en la sombra, se comunica conmigo, me pide que me una a unos fines que ya no forman parte de la sabiduría que buscaba tener.
No he podido acabar mis escritos, ni siquiera las comprobaciones de mis últimos estudios, pero no importa, a estas alturas sé que son ciertos, sé que ya no puedo equivocarme y no me importa no transmitir el conocimiento. Lo que he conocido de las vicisitudes oscuras de este mundo es sólo para mi deleite, el mundo puede pudrirse a la espera de estos conocimientos. La podredumbre y moralismo en la que está sumido no le dejaría siquiera comprenderlo, ni con mi ayuda ni con la de ningún mesías. Estas son las palabras que dejo en herencia antes de escapar de mis actos: al infierno esta tierra y existencia vacías.
Christos Salazar” El chrysos sintió su cuerpo convertirse en una losa fría por un momento y para cuando el papel se arrugó y destartaló en su puño, su compañero ya llevaba un rato vigilándolo desde la puerta del despacho. En un acceso de machacó el debilitado cráneo con el puño y dedicó patadas y golpes a la silla, el cadáver y escritorio, además de todo aquello que aparecía frente a él cuando se giraba bruscamente. Tomó aire frente al escritorio una vez lo vio conveniente y antes de dedicarse a buscar cualquier cosa de utilidad dio una última patada a la silla ya destrozada, esparciendo más los huesos por el suelo. Había llegado a su destino y, sin embargo, ninguno tuvo la sensación de que así fuera. Misión finalizadaRecompensansas:
- Informes sobre la creación y modificación de maldiciones.
- Dos volúmenes antiguos de magia oscura.
Las recompensas de lugares corresponden a objetos que se encontraron durante alguna parte del recorrido. Cierzo4 puntos de experiencia Piedra de comunicación (montañas Errna) [Piedra que permite la comunicación entre dos personas en un radio de 500m. Cuanto mayor es la distancia, más distorsionada se escucha la voz. Para emplearla el poseedor debe frotarla con las manos inicialmente y después dársela a la persona con la que se desea comunicar. La piedra debe cambiar de poseedor por muerte, robo u ofrenda para activarse al ser frotada por su nuevo dueño] Anillo réplica (Taberna Brraska Larr) [El portador del anillo puede enfocarlo hacia cualquier lugar para que en él aparezca una réplica de su persona que imitará sus gestos.Sólo es necesario apuntar a la zona deseada hasta que la copia aparece. La réplica tiene una duración de diez minutos o hasta que la atraviesen] Gafas que ven a través de tres capas (Campamento de proscritos de Caligo) [Siguen necesitando la luz/oscuridad que el usuario necesite para ver, y no se fijan en el grosor, sino en el número de capas] Nagore3 puntos de experiencia Anillo réplica (Taberna Brraska Larr) [El portador del anillo puede enfocarlo hacia cualquier lugar para que en él aparezca una réplica de su persona que imitará sus gestos.Sólo es necesario apuntar a la zona deseada hasta que la copia aparece. La réplica tiene una duración de diez minutos o hasta que la atraviesen] Collar del rubí pentagonal (Taberna Brraska Larr) [Bonito collar que vuelve más ligero a quien lo porte permitiéndole dar saltos mayores cayendo con más suavidad o a mayor distancia. También es una hermosa joya para las grandes ocasiones ] Gerald4 puntos de experiencia Anillo réplica (Taberna Brraska Larr) [El portador del anillo puede enfocarlo hacia cualquier lugar para que en él aparezca una réplica de su persona que imitará sus gestos.Sólo es necesario apuntar a la zona deseada hasta que la copia aparece. La réplica tiene una duración de diez minutos o hasta que la atraviesen] Pendiente de garra (Taberna Brraska Larr) [Permite escuchar cualquier cosa sobre la que el portador ponga atención hasta 10m de distancia o a través de dos paredes] Baraja del Fullero (Campamento de proscritos de Caligo) [Baraja mágica de apariencia normal cuyas imágenes se redibujan a gusto del poseedor o lo informan en el dorso para hacerle ganar en el juego sin rastro de trampa aparente]. | |
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