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| Sala de entrenamiento | |
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Autor | Mensaje |
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Rick
Edad : 32 Mensajes : 2682
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 7:06 pm | |
| Sin detenerme, levanté la mano derecha, ¡QUE NO LA IZQUIERDA!, continuando con aquel ejercicio, esforzándome por levantar mi cuerpo por completo, mi pesado, musculoso y sudoroso cuerpo viril, con mi mano menos débil. Tras varias repeticiones, con un último impulso, me puse en pie, elegante y virilmente, de un salto. Pero claro, aquel hombre necio no comprendía la preparación necesaria para hacer proezas como aquella. Simplemente se limitaba a volar por aquellas barras, escurridizo, pero inofensivo. Aquello no era, para nada, masculino. Era hasta un poco como lo contrario.
Limpié con la muñeca la fina capa de sudor que me cubría la frente y miré a mi alrededor. Necesitaba buscar algo tan superiormente viril a Gerald que no pudiera competir con ello. No había sentido tantas ganas de derrotar a alguien como a él en aquel momento desde hacía muchísimo tiempo. Ya ni me acordaba del origen de mi tristeza, en aquel instante. Solo pensaba... ¡ACABAR CON GERALD! Aquel tatuaje que tenía no era nada comparado con mis tatuajes. ¡Y SU DRAGÓN NO ERA MÁS HABILIDOSO QUE EL MÍO! Yo era más varonil que aquel tipejo. Aquel tipejo tan simpático. Gerald. ¡Aquel tipejo!
Me acerqué a la pesa que él había estado levantando, mirándola con menosaprecio. La tomé con la derecha y, sintiendo como todos los músculos de mi brazo se tensaban, levanté la pesa, frunciendo el ceño y apretando la mandíbula, dejando ir un gruñido de lo más masculino. ¡¿DOS BRAZOS?! ¡¿QUIÉN NECESITABA DOS BRAZOS?! Aquello ya llegaba a un nivel difícil, pero seguía pudiendo hacerlo. Necesitaba tener toda mi mente, como mi varonil cuerpo musculado, puesto en aquello. Pero podía. ¡LEVANTAR AQUELLA PESA QUE ÉL HABÍA ALZADO CON AMBOS BRAZOS PARA MÍ NO ERA MÁS QUE COSA DE UNO!
¡UNO!
¡DOS!
¡TREEES...! | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 7:20 pm | |
| Miro de refilón como se levanta de nuevo y se dirige a las pesas. Claro, ¿qué más va a poder hacer un animal de bellota? Ese animal no sabía hacer más que cargar peso como una mula de carga, no era más que un pardillo que creía que la fuerza era la base de las capacidades de un hombre. Seguro que su mejor polvo fue meter y sacar durante veinte segundos. En la postura del misionero.
Aflojo las piernas y bajo de la barra dando una voletereta para caer limpiamente en el suelo. La fuerza había que coordinarla con velocidad y reflejos, la técnica era elegancia en base, a pesar de que en combate la adrenalina hacía que los movimientos fuesen bastos, se podía ver perfectamente al guerrero que había cultivado sus capacidades y al que simplemente zarandeaba un hierro aplastando cualquier cosa.
Se cree que va a superarme por levantar las pesas con uno de sus brazos de gigante. Ni siquiera es el peso máximo que yo puedo levantar. Me acerco a las cuerdas que llegan hasta el alto techo y me agarro a una de ellas para empezar a trepar rápidamente, únicamente con las manos, mientras mis piernas quedan colgadas de forma cargo con todo el peso de mi cuerpo en la espalda. Me apresuro a acelerar mi subida, para que sea consciente de mi agilidad. Podría saltarle al cuello y partírselo con una llave de piernas sin que sus remos llegasen a tocarme. | |
| | | Rick
Edad : 32 Mensajes : 2682
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 7:35 pm | |
| Dejé la pesa en el suelo, aflojando el brazo mientras miraba con arrogancia al hombre. Esbocé una sonrisa segura. Seguro que no sabía hacer más que aquello a las damas: mucho postureo y todo aquello, pero a la hora de la verdad salía colgado por unas lianas como un mono. No era más que un cobarde de aquellos que no eran capaces de ir de frente. Maldito rubiales incompetente.
-¿Qué eres? ¿Un mono?-gruñí, viril, pues en mi estado ya solo podía hablar de aquel modo viril, aunque con una sonrisa divertida.
Me acerqué a mi arma y la alcé con una mano. Después de todo aquello parecía tan ligera como una pluma, aunque había quien creía que luchar con aquello era ridículo. No era nada para mí. Una más ligera se me iría de las manos como una ramita de árbol. ¡ASÍ DE VARONIL ERA YO! ¡VÄRDJAS! ¡DEMUESTRA TU PODERÍO!
Comencé a hacer complicadas fintas, moviendo aquellos veinte kilos de metal como si no fuesen más que una pluma. Un barrido controlado, una estocada poderosa, soltando una mano, notando cómo se me tensaban los músculos de la espalda al contener el impulso para, luego, de un tirón, hacer un corte horizontal, muy amplio, que seccionaría a cualquiera por la mitad. Aquello no era más que una pequeña demostración. La fuerza no era todo. ¡MI CAPACIDAD CON ARMAS ERA DEVASTADORA DE MALHECHORES! Los movimientos eran exactos. Aunque pareciese lo contrario, podría tallar una hermosa estatua de madera con mis golpes, dándole la forma exacta con mi técnica, si supiese tallar estatuas. | |
| | | Silvio Moderador
Edad : 31 Mensajes : 1997
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 7:55 pm | |
| Llevo un buen tiempo asomado detrás de la puerta de la sala de entrenamiento, con los ojos como platos y tan quieto que podría pasar perfectamente por una estatua. Mis sentidos no pierden ni un ápice de información. Trago saliva. Son tan... sexys... cada uno a su manera, por supuesto, pero creo que ahora mismo no podría escoger.
*se queda espiando de rodillas detrás de la puerta sin ser visto* | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 7:57 pm | |
| Una vez arriba escucho al cazurro de Rick preguntar por mi especie. Colgado de la cuerda, suelto una risa orgullosa antes de responder.
—¡Soy un hombre que llega a lo más alto! —Le reprocho, divertido. Sé que soy superior a ese gorila de Dehnel, no hay por qué no divertirse con el enfrentamiento.
Cuando veo que coge su arma me dejo resbalar por la cuerda hasta llegar cerca del suelo, desde el que salto y caigo a plomo, doblando un poco las rodillas para caer con amortiguación. Luego me paso el dorso de la mano por la nariz, aspirando con fuerza. Finalmente escupo a un lado y me dirijo hacia mi arma para desenvainarla. Se creerá que se mueve muy rápido con ese trozo de metal. Podría trocearlo cien veces entre que enarbola su arma y la descarga.
Tomo la guardia respirando profundamente, con calma. Entonces empiezo a moverme con gran rapidez, como si alguien contabilizase cuántos cortes puedo dar en un minuto. Corto en vertical, en diagonal, me grio en armónicos movimientos para cambiar de objetivoy seguir atacando mientras mi arma silva ligeramente al cortar el aire. Alterno con patadas, codazos o golpes con la empuñadura como si me enfrentase a una panda de enemigos que me atacan a la vez. Después de hacer la mayor cantidad de movimientos en el menos tiempo posible, doy una patada a una de las baras de madera para separarla de la pared y aporvecho la inercia de su viaje hacia el suelo para cortarla un par de veces antes de que caiga. Tomo aire y me paso una mano por el pelo. El diseño y arte de la katana es mucho más mortífero que el burdo uso del mandoble. | |
| | | Rick
Edad : 32 Mensajes : 2682
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 8:13 pm | |
| Lo miré de reojo, aumentando también yo la velocidad de mis movimientos. Quizás no podía golpear tan rápido como él con aquella ramita, pero mi alcance era mucho mayor, y cualquier roce de mi espada implicaba un peso y fuerza descomunales. Si él fallaba quizás no te hiriese, o solo te hiciese un cortecillo, pero si yo te alcanzaba mal quizás solo te partiese un brazo. No le tenía miedo a sus golpecillos. Podría ser el hombre más rápido del mundo (y empezaba a creer que quizás lo fuera, ya se me entendía), pero con aquellas artes no traspasaría la armadura escamosa de un dragón ni intentándolo mil veces.
Coloqué varios muñecos humanoides de aquellos de madera seguidos, uno detrás de otro, llevando la espalda echada al hombro con calma. Una vez reuní un grupo de ocho empuñé a Värdjas. Realicé un solo corte, preciso y perfecto, horizontal, exacto, veloz, como llevaba practicando años, imprimiendo un extra de fuerza cuando el filo rozaba al primero para aumentar allí la intensidad. El metal dividió en dos, uno a uno, sin detenerse, a todos los "enemigos", haciendo caer la mitad superior de sus cuerpos al suelo, limpiamente. ¡Y SI FUESEN DE ROCA EL RESULTADO SERíA EL MISMO! Mi poderoso cuerpo tenía el aguante suficiente para arrancar la cabeza de un dragón gigante si era necesario, y el acero de Värdjas era de los mejores de mi familia. Y todavía no había mostrado el cuerpo a cuerpo. También en aquello era una bestia del bien, noble y poderosa.
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| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 8:29 pm | |
| Me quedo mirándolo cuando se pone a reunir a los muñecos para ponerlos en fila y partirlos en dos de un bandazo. Me miro las uñas con indiferencia y luego suelto un bostezo. Se creerá que mi katana no puede partir en dos a cualquiera. Es un arma de fisionomía perfecta por muy frágil que pueda parecer y su capacidad de cortar o atravesar es mucho mayor que otras armas más pesadas.
Es mi turno, así que hago acopio de mis propios muñecos y coloco a cinco en círculo. Luego me meto dentro del círculo y cierro los ojos un momento, tomando aire. Ataco rimero al que tengo delante con un rápido y fuerte corte vertical que lo parte en dos hasta el estómago, en el que giro el corte para que salga hacia la izquierda y me ayude a coger inecia para rebanar la cabeza del muñeco que está al lado en un corte diagonal hacia arriba. Aprovecho el movimiento para girarme hacia el muñeco que ahora teno detrás y la lanzo un corte diagonal a la cabeza de nuevo. Sigo la trayectoria para cortarle las manos al penúltimo mueco que me falta y lo agarro de la nuca para lanzarlo contra el último. El último ataque de la cadena lo lanzo para clavar mi katana en el estómago del muñeco que subre al otro. Ligeramente hacia arriba para que al de detrás le quede clavada en la garganta.
Dejo la katana ahí dentro y tomo aire, girándome hacia Dehnel y acercándome a él con pasos lentos pero seguro y amenazantes para encararlo.
—¿Sabes hacer algo más a parte de romper rocas con la cabeza, Dehnel? —Pregunto con una media sonrisa socarrona enseñando lso dientes y mirándolo a los ojos. | |
| | | Silvio Moderador
Edad : 31 Mensajes : 1997
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 8:40 pm | |
| Hala... son geniales los dos. Yo no tengo ni idea de hacer todas esas cosas... Me siento un poco inútil, la verdad. Y más desde que perdí mi arma. ¿Qué hacer? Quizá debería aparecer y unirme a ellos para verles abiertamente, pero creo que sería un error. Se reirían de mi por no saber si quiera tirar una mísera flecha. La división mágica en la que me encuentro dista mucho de este tipo de entrenamiento, pero no me hace peor por ello, ¿verdad? Entre duda y duda, voy admirándoles y, llegado un punto en el que me duelen las rodillas, decido irme. Me he entretenido bastante viéndoles.
*Se va*
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| | | Rick
Edad : 32 Mensajes : 2682
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 8:45 pm | |
| Enarqué una ceja, contemplándolo, con la espalda apoyada en el hombro con un aire muy heroico y varonil. Sí, muy bonito. Quería aplaudir, incluso. Pero aquellos monigotes estaban algo quietos, ¡¿NO?! ¿Acaso se creería que un enemigo no aprovecharía para atacar por la espalda en lo que él cortaba? No, en su mundo maravilloso los enemigos eran estúpidos y no se movían. ¡¡POR FAVOR!! Si tenías enemigos en círculo tenías que ser capaz de acabar con todos los innobles malhechores de un solo golpe o se lanzarían a tu espalda como malvados y crueles infames enemigos que eran! Y su método solo funcionaba contra enemigos estúpidos y quietos, pero no era eficaz para matar un dragón.
Su pregunta me hizo fruncir el ceño. Saqué pecho, arrogante. ¿A qué venía aquel ataque? Torcí el gesto, inconformado.
-Me temo que olvidaste tus modales durante el entrenamiento -respondí, con voz profunda y masculina-. Aunque comprendo que a veces la envidia puede resultar muy difícil de controlar.
Sonreí, burlón. | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 8:59 pm | |
| Alzo las cejas cuando responde sobre modales. Perdone, señor caballero noble que sólo es capaz de matar enemigos que están de frente. Miro hacia otro lado, desairado.
—Pff, ¿envidia? Supongo que te refieres a la tuya. Comprendo que no siempre se puede admirar a un miembro del ejército tan bien adiestrado. Pero no te preocupes, quizás entrenado puedas acercarte un poco —Replico, seguro y altanero, levantanto el mentón frente a él. Procuro controlar mi lengua, no quiero empezar a soltarle pullas a Rick Dehnel y que se vayan por tierra mis enredos.
—En fin, ya he perdido demasiado tiempo aquí—Aclaro, dandole la espalda para dirigirme a mis cosas. | |
| | | Rick
Edad : 32 Mensajes : 2682
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 9:09 pm | |
| Me llevé las manos a la cadera, dejando ir una carcajada. ¿Por qué lo envidiaría a él? Apenas podía levantar pesos increíbles, ni presumir de un noble cuerpo de escándalo y esfuerzo. Era simpático, pero no había nada que envidiase de algo como él.
-¿Envidiarte a ti? Tengo todo lo que desearía aquí - exclamé, señalando mi pecho, refiriéndome a todo yo. En aquel momento sentía que todo el mundo me pertenecía, y no había nada que me faltase. El sudor viril solo aumentaba aquella sensación-. Espero que no te creas todo lo que dices, pues sería muy triste.
Pobre Gerald... Aquella competición tan sana había sacado lo peor de él. No me burlé, sin embargo, cuando empezó a huir con el rabo entre las piernas. Aquella sería mi victoria, pero no pensaba restregársela. Yo era superior a aquello.
-Comprendo -dije, con tono neutro.
"Perdido el tiempo". Si te escapabas como un incapaz y cobarde claro que habías perdido el tiempo. ¡PERO YO NO! Había entrenado como un poderoso noble. | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 9:18 pm | |
| Dejo de escuchar a Dehnel una vez le doy la espalda. No creo que sea alguien de quien preocuparse, ni tampoco quiero dejarme llevar. Es más bobo, más burdo y más feo que yo, no hay punto de comparación con lo que tampoco hay duelo. Si me llegan a ver dejándome enredar por este tipejo seguro que se ríen de mí.
Me seco con la camisa y luego me la pongo. Tengo ganas de una buena ducha. Al menos me ha servido para lo que quería. Me dirijo hacia donde ha cavado mi espada y la arranco, colocando un pie en el cuerpo del muñeco. Vuelvo junto a mis cosas, envaino y me cuelgo el arma y el abrigo del brazo. Voy a girarme hacia Dehnel cuando siento un fuerte tirón en el brazo izquierdo que me impide moverme por unos segundos. Aprieto la mandíbula y el ceño esperando a que se pase rápido. Es entonces cuando me giro para marcharme, algo dolorido.
—Ya nos veremos, Dehnel —Y espero que ésta vez sea con más tiempo entre medias. *se va* | |
| | | Rick
Edad : 32 Mensajes : 2682
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Ene 30, 2014 9:38 pm | |
| Lo vi ir de un lado para otro, preparándose para marcharse, completamente serio. Cuando por fin me miró hice un gesto con la cabeza, alzando la barbilla un instante, despidiéndolo de aquel modo.
-Buenas noches -respondí, seco, sosteniendo la espalda contra mi hombro.
Me ha gustado entrenar tan intensamente, aunque no la actitud y el mal perder de Gerald, pero supuse que todo el mundo tenía derecho a tener un mal día. Aunque a raíz de aquello no dejaba de imaginarlo en aquella cita con Lea que me había dado el primer empujón para enfrentarme a él, indirécticamente. Quizás la llevaría a tomar algo ligero, con un buen vino, y luego la invitaría a un postre delicado y delicioso... Comencé con unos estiramientos, centrándome en todas las partes de mi cuerpo, o acabaría con agujetas después de aquello. Por muy ejercitado que estuviese, los esfuerzos menos normales siempre conllevaban cierto arrepentimiento. Luego darían un paseo bajo las estrellas y se tomarían de la mano para besarse. Me toqué la punta de los pies con las manos, sintiendo un ligero y tirante dolor en los gemelos. No era como una contorsionista, pero tampoco rígido como una vara seca, como muchos imaginaban al verme. Mi cuerpo había sido cultivado con esmero durante años. La llevaría a un hotel y la desnudaría, echándola primero sobre una cama y luego arrancándole el vestido, descubriendo su cuerpo proporcionado y hermoso, sus pechos pálidos, sus suaves muslos y su...
Dejé mi estiramiento de bíceps en aquel momento, negando repetidas veces para sacarme aquello de la cabeza. Desde luego, Gerald me había prometido que no lo haría, y por mal perder que tuviese no creía que me traicionase... ¡Gerald no haría algo como aquello! Era un hombre bueno y parcialmente noble. Había ayudado incluso a Inger tras el ataque... Quizás al no haber hablado con él había hecho mal... ¿No debía contarle lo sucedido para que la apoyase si ella no se atrevía a recurrir a mí? Aunque yo prefería ayudarla yo, si necesitaba algo.
Al acabar de estirar, tomé mi ropa, mi espada y me marché.
*se va* | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Jue Feb 06, 2014 5:43 pm | |
| No deja de llover, nunca deja de llover. Sólo dejó de llover el día que estuvo nevando. Y luego volvió a llover. Necesito sol, estoy harto del mal tiempo. Quiero tumbarme en el lago y dormir la siesta.
Sin mucho más que hacer, llego a la sala de entrenamiento para retomar las lecciones cuerpo a cuerpo ahora que he repasado algo de teoría. Siempre he sido de los que creen que la práctica es lo que mejor enseña.
Me saco la gabardina y la camisa y me descuelgo la katana para dejarla a un lado, de momento. Luego me tomo un tiempo vendándome los puños y las muñecas para pasar a calentar un poco. Saltos en el sitio, esprín en el sitio, un par de estiramientos de espalda y a tomar viento. Ya calentaré suficiente con los golpes.
Me pongo frente a uno de los muñecos y coloco mis puños en guardia. El izquierdo un poco más retrasado, a la altura del estómago, y el derecho algo más alzado, a la altura de la cara. Mantengo el tronco un tanto tenso, como buen fajador. Las piernas las abro un poco más que en la guardia de la espada, pero mantengo la izquierda algo por delante de la derecha debido a la costumbre. Empiezo a moverme, cambiando el peso de una pierna a otra. Ya casi le pongo cara al muñeco.
Lo golpe rápidamente. Cara, costado, hígado, esternón y cabezazo. Repito los mismos golpes en distinto orden, haciendo series de golpes rápido, como ráfagas inmediatas. De vez en cuando cambio el cabezazo por pisotón y gancho de izquierda, o patada lateral a la rodilla para hacer que se parta. También rodillazo al estómago o a la entrepierna. Esto estaría mejor si el monigote tuviese cierto grado de respuesta.
Dedico mi tiempo a hacer repeticiones de los distintos combos. Golpes secos y rápidos que sirven tanto para noquear a enemigos menos corpulentos como para aturdir a los más resistentes. Me concentro primero en puños y patadas, sin mayores añadidos. Siempre está bien tener una base rígida. Hago movimientos de esquive lateral, prácticamente iguales a los de las técnicas de posterior agarre y control. Golpeo un par de veces, me agacho, puñetazo a la entrepierna, puñetazo ascendente a la mandíbula mientras me incorporo, salto encogiendo las piernas para evitar patadas y aprovecho el impulso para empotrar mis botas contra su pecho, tirando el muñeco hacia atrás y cayendo yo de espaldas un poco más atrás. Arqueo la espalda y me pongo en pie de un salto. Muevo los hombros y el cuello, notando como triscan algunos huesos.
Corro de nuevo hacia el muñeco, ahora ya más entrado en la pelea. Cambio uno de los puños por la mano abierta con los dedos unidos, formando una tabla, y golpeo con el dorso su sien, su cuello; vuelvo a cerrar uno de los puños y golpeo la boca de su estómago; pongo los dedos en garra para lanzar un golpe seco con la mano a la nuez; agarro la cabeza del monigote y doy un rodillazo en su frente. Me detengo y tomo algo de aire. Mientras me recompongo dejo los puños quietos y doy patadas alternas a sus costados. Con la derecha y la izquierda.
Al rato vuelto con mis ataques variados. Puñetazo a la articulación del hombro, clavando los nudillos para aflojarla, sin perder un segundo mientras recojo el brazo izquierdo con la inercia del golpe, agarrar el mismo brazo con la derecha y aprovechar la misma inercia de la izquierda para lanzar un golpe contra el codo para partirlo; soltar el brazo destrozado y puñetazo con la derecha al estómago. Y en el momento de reacción al golpe, alzar la izquierda para golpear con gran fuerza la cabeza, girando el cuerpo en el mismo sentido de la patada y hacia abajo, de forma que el peso ayuda a la fuerza del golpe. Apoyo las manos en el suelo para compensar el desequilibrio y continúo el movimiento pasando las piernas en arco y notando como la cabeza del muñeco sale despedida. Tras el semicírculo con las piernas, acabo de pie un poco más lejos del muñeco. Tomo aire y estiro los brazos. Siempre me han parecido pobres aquellos que han subestimado la flexibilidad de la raza.
Tras entrar en calor con el entrenamiento de golpeo, paso a la parte con mayor peso marcial. Lo malo es que no podré utilizar la fuerza del muñeco en mi beneficio. Tendré que llamar a Cierzo un día para practicar eso. Coloco el brazo del muñeco como si fuese a golpearme y entonces empieza la fiesta.
Me aparto unos pasos de él para poder acercare corriendo (lo más parecido que tengo a que me golpeé y tenga que apartarme rápido) y, al llegar junto a él, me aparto rápidamente con un juego de pies al tiempo que sostengo su brazo con la izquierda, doy un golpe a su mandíbula con la derecha para desconcertarlo; al tiempo, agarro su brazo haciendo palanca para obligarlo a doblarse por la propia inercia de su cuerpo y aprovecho la rodilla flexionada para dar un fuerte pisotón en su menisco y partirlo. Al soltar el muñeco, éste cae por la pérdida de equilibrio y el daño.
Cojo otro y lo coloco con los brazos hacia adelante. Para este no me hace falta tanto remilgo ya que es más sencillo. En cuanto corro hacia él, me aparto ligeramente para frenarlo en seco con un golpe del brazo a la altura de las costillas y remato con un codazo en la nuca que lo tira al suelo. Lo recoloco para continuar.
Ésta vez, así como me aparto sosteniendo su brazo, doy un puñetazo a su hígado, me muevo estratégicamente y lanzo una fuerte patada a sus corvas para hacerlo caer al suelo. Vuelvo a ponerlo en su lugar.
Ahora cojo uno de los cuchillos de prácticas. Voy contra el muñeco, agarro con fuerza su muñeca y la tuerzo para bloquearle el brazo de forma que lo coloco contra mi pecho. Antes de que le dé tiempo a reacción le clavo el cuchillo en la nuca con la izquierda. Arranco el cuchillo y me separo. Vuelvo a ir contra el muñeco. Ésta vez esquivo como li estuviese atacándome continuamente. Evitando un puñetazo, un agarre, limitándome a utilizar mi velocidad para evitar que me alcance. Finalmente, agarro uno de sus brazos y lo bloqueo hacia abajo, giro sobre mí mismo para poner mi espalda contra la suya y clavo mi cuchillo en sus riñones. Suelto el brazo, posiblemente dislocado, y arranco el cuchillo del muñeco de nuevo.
No dedico mucho tiempo al cuchillo, pues sus movimientos son prácticamente iguales a los que he estado practicando con los golpes de mano, sólo que lo ataques se vuelven mucho más mortíferos. Acabo lanzando el cuchillo contra uno de los muñecos más alejados, para deshacerme rápidamente de él, y vuelvo a prestar atención al que tengo delante.
Vuelvo a enzarzarme en una pelea de puños a puntos vitales con el muñeco para mantener el calor y la rapidez. En cuanto me canso ya de tanta historia, me aparto un poco para coger distancia, voy hacia el muñeco, me apoyo en sus brazos para encaramar mis piernas a su cuello y me tiro hacia atrás con la fuerza como para dar una voltereta, apoyando las manos en el suelo en cuanto llego. De esta forma lo levanto del suelo haciendo una parábola hasta que cae de espalda. Yo lo suelto en el momento oportuno y quedo semi arrodillado, de espaldas a él y tomando aire.
Me levanto de suelo y tomo aire. Me paso las manos por el pelo, recolocándome. Creo que ya estoy aburrido. *recoge sus cosas y se va* | |
| | | Frikka
Edad : 28 Mensajes : 1436
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Lun Feb 10, 2014 8:13 pm | |
| Hoy me dedico a entrenar de una forma un poco más interactiva... Aunque todavía no me he decidido a probar contra gente. Quiero pulir mi técnica un poco más para que las manos no me fallen si me asusto o pierdo los nervios. Me cuesta concentrarme, al fin y al cabo...
Tras un breve calentamiento, procedo a enfrentarme de lleno contra los típicos monigotes de madera que tienen por aquí. En concreto, hoy me centro en tratar de que mis cortes sean limpios. Es algo que depende más de la forma en que se haga que de la propia fuerza... Si el arco que realiza el filo es el adecuado, entonces rebanará la madera o el cráneo de mi oponente como la mantequilla. Pero no es tan fácil en la práctica.
Cada vez la espada se queda encallada de una manera diferente. A veces no va lo suficientemente recta, o segura, o me tiemblan un segundo las manos, o no estiro suficiente, el arco fue imperfecto, el ángulo no sirve, tensé demasiado las muñecas... Qué asco.
*se queda practicando*
Estoy un buen rato probando diferentes cortes hasta que, cuando estoy a punto de darme por vencida, uno de ellos raja la cabeza hasta la barbilla. Eso me arranca una sonrisa. Pero ya estoy harta por hoy.
*estira y se va* | |
| | | Frikka
Edad : 28 Mensajes : 1436
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 8:04 pm | |
| De modo que es así... Lo cierto es que me ha costado venir aquí, pero al final lo hice. Supongo que es esa sensación de que si una no viene acabará quedando por los suelos, y ya bastante en ridículo me dejé ayer. Por micho que siga molesta hacia él... Pero la verdad es que llevo un buen rato y no aparece.
Frunzo el ceño, incómoda. Me entretengo estirando, sin más, bostezando vagamente. Me empiezo a acostumbrar a eso de estar despierta a las siete... A las seis incluso, algunos días. Aunque temo la llegada de la primavera y de la luz.
Tras un buen rato esperando, mosqueada, me largo. Ya vendré luego.
*se va* | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 9:10 pm | |
| Llego a la sala de entrenamiento con paso firme pero relajado. Dormir y correr me han relajado bastante y mi humor no tiene nada que ver con el de ayer. Sin embargo, entrar a la sala me genera cierta molestia pues, de la forma que se marchó ayer Frikka, no paro de pensar en que no va a aparecer por aquí y eso sí que molesta más. No obstante, no quiero irritarme por una gilipollez de nuevo, así que procuro no pensar en ello y darle un voto de confianza.
Me saco el abrigo y lo dejo junto a mi katana, que desato de mi pecho. Luego cambio mi camisa por la camiseta vieja que utilizo para entrenar y empiezo a colocarme la armadura de entrenamiento. Solamente el tare y el do, por ahora.
Luego me acerco a los armarios donde guardan las espadas y sables y busco un boken y un shinai que me parecen apropiados. Tras probar alguno de ellos, me decanto por los que más se acomodan a mi forma y me voy hacia donde están mis cosas.
Dejo el shinai de momento y me pongo a calentar con el boken. Caminando adelante y atrás dando largos cortes verticales, trazando un arco amplio con los hombros totalmente relajados. Adelante, atrás, adelante, atrás. De vez en cuando alterno con cortes diagonales a derecha e izquierda, pero siempre con un ritmo rápido y suelto.
[...]
Llevo ya un buen rato entrenando solo. Practicando los desplazamientos laterales o en giro, recorriéndome la sala con grandes pasos, con pasos cortos y contenido, con pasos de cruce de piernas; practicando cortes verticales mientras camino, cortes diagonales, cortes a las muñecas, cortes al tronco... He practicado con movimientos rápido, con movimientos lentos para repasar bien las técnicas, combinando técnicas de espada y cuerpo a cuerpo... E incluso me he peleado un par de veces con los muñecos de madera. Diría que llevo aquí al menos una hora y esa maldita estúpida no aparece para entrenar.
Desquito mi mal humor al respecto haciendo fuerte kiai mientras llevo a cabo los demás ejercicios. Abro las piernas y flexiono las rodillas como si estuviese sobre una montura para empezar a hacer cortes verticales amplios, manteniendo los gritos desde el estómago. Lo que me molesta no son sus tonterías, sino que le dé una oportunidad para entrenar sacrificando mi tiempo y ni siquiera se moleste en aprovecharla. *se queda* | |
| | | Frikka
Edad : 28 Mensajes : 1436
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 9:25 pm | |
| Hay sonidos dentro. Ergo, Gerald ha llegado. Ahora seré yo la que parezca llegar tarde, y no me apetece una mierda.
Antes de abrir la puerta inspiro profundamente un par de veces, concentrándome. Dibujo, entonces, la mueca de mala hostia, el ceño fruncido que no falte, y abroz, entrando y cruzándome de brazos, mirándolo desafiante.
No voy a decir nada. Que ataque él primero. Así podré justificar cualquier cosa. Porque, la verdad, no me siento muy inspirada... Y echar mierda por la boca es un arte más complicado de dominar de lo que puede parecer a primera vista. | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 9:30 pm | |
| En uno de los ejercicios, cuando ya me cae algo de sudor por la frente debido a la ropa y el equipo, miro de reojo como alguien entra en la sala y entonces veo que por fin se ha decidido a aparecer la tía. Me giro hacia ella y frunzo el ceño por su cara de cabreo. Aún por encima. Agarro el boken con la izquierda y me paso la derecha por la frente.
—Ya era hora, ¿eh? Menos mal que he venido tarde para que te diera tiempo a levantarte —Le reprocho con tono severo, ignorándola luego para ponerme a relajar los brazos con cortes verticales.
—Ponte a calentar —Le espeto, ya cansado de esperar. | |
| | | Frikka
Edad : 28 Mensajes : 1436
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 9:36 pm | |
| Frunzo el ceño, alzando ligeramente la barbilla, pedante, frente a sus palabras. No me puedo creer que haya tardado por eso. De modo que mi esfuerzo por adaptarme a su puto horario no es más que una puta banalidad inútil. De acuerdo. La próxima vez no me levantaré hasta las doce de la noche.
-Vine aquí hace un par de horas, pero ya vi que la seriedad no era mucho lo tuyo, así que me fui a hacer cosas más útiles que esperarte como una gilipollas -gruño, menos agresiva de lo que hubiera deseado.
Evito mirarlo. No me apetece entrenar con él. Estoy de mal humor y, además, no he mejorado lo suficiente. | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 9:44 pm | |
| Lo que dice me molesta un poco más, pero más porque intenta hacerme quedar a mí como el irresponsable a este respecto y todo porque resulta que hoy a la niña se le ha dado por madrugar. Pues si no toma en cuenta que he escogido la hora por ella, que se queje de lo que le dé la gana. No voy a dar importancia a algo que la próxima vez se solucionará acordando una hora.
—Me da igual. Ahora estamos los dos aquí. Ponte a calentar —Le respondo con tono cortante, seco y más severo, continuando con mi ejercicio. Creo que todavía no entiende que cuando hablo en serio, hablo en serio. | |
| | | Frikka
Edad : 28 Mensajes : 1436
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 9:52 pm | |
| Dejo ir un gruñido seco, mascullando un par de insultos en piscis que me enseñó Jord hace tiempo. Y si no los entiende, mejor, aunque me aseguro de que la intención se capte, y ojalá le joda, añado para mí. Luego me pongo a trotar, floja, con desgana.
Tras un rato corriendo me pongo a estirar, entre resoplidos de queja y murmullos. Eso sí, me aseguro de estirar bien, de todos modos. Como, aún por encima, me de un tirón, me voy a cagar en la madre que me parió.
Cuando acabo, abro y cierro las manos varias veces. Roto los brazos, las muñecas... Luego lo miro, de reojo.
-Ya -escupo, seria. | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 9:58 pm | |
| Después de un rato en el que me dedico a ignorar sus sonidos para seguir relajando los músculos tras el tiempo que he estado entrenando solo, parece que da el aviso para informarme de que está lista. Me detengo y vuelvo a mirarla.
—¿Todavía no te has preparado? No sé a qué esperas —Le reprocho, algo menos brusco que antes, colocándome el boken sobre el hombro. Luego simplemente me giro para dirigirme a mis cosas y apoyar el boken. Me arrodillo y me coloco el men sin ningún protocolo previo. Una vez estoy listo, cojo el shinai y vuelvo al centro de la sala.
—Hoy vamos a pelear de verdad —Le advierto. | |
| | | Frikka
Edad : 28 Mensajes : 1436
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 10:14 pm | |
| Resoplo, dejando ir el aire, hastiada de todo esto. Si lo que quería era darme una paliza y humillarme podría haberlo dicho antes. Me resulta una putada bien gorda. No sé si lo mejor será que haga el gilí un rato y luego me largue, porque todavía no creo que haya mejorado tanto como para impresionarlo. Paso de que me obligue a admitir que he estado entrenando a diario en secreto.
Suspiro y me visto, como él. Hago una leve reverencia, todavía sentada, apoyando las manos en el suelo y bajando el rostro, pero no lo saludo a él. Al atarme el men me siento como en casa, por un momento. Papá, los chicos y yo hacíamos esto bastante. Sin la posibilidad de quedarme sin mano de por medio me siento bastante cómoda.
Tomando el shinai, acercándome de mala gana, me planto frente al chrysos.
-Acabemos cuanto antes -murmuro, desganada. | |
| | | Gerald
Edad : 35 Mensajes : 1331
| Tema: Re: Sala de entrenamiento Mar Feb 11, 2014 10:26 pm | |
| En cuanto está lista no tarda en venir a ponerse frente a mí y yo ya mantengo la guardia principal a su espera. Cuando termina de hablar tardo apenas un segundo en soltar un fuerte grito y lanzarme contra ella, como si fuese a atravesarla sin más.
Sin embargo, lo que hago en cuanto mi shinai toca el suyo es darle un fuerte golpe lateral, hacia la derecha, para apartarlo de mi camino y sentenciar con un men vertical y contundente para luego pasar de largo bastante distancia y dar rápidamente la vuelta.
Dejo salir el aire por la nariz y, una vez recupero mi guardia, me relajo, rebajando la intensidad de mi combate. No quito mis ojos de ella. Ahora tendrá que tomárselo en serio, aunque sólo sea por ahorarse otro mamporro. | |
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| Tema: Re: Sala de entrenamiento | |
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